3J en Bahía: la deuda sigue siendo con nosotras

Somos mujeres trabajadoras, somos repartidoras, docentes precarizadas, enfermeras que le ponen el cuerpo a la crisis. Somos las que te atendemos en los locales de la cuidad cada vez que vas a comprar. Nos tienen en negro, sin pago producto de la cuarentena, sin seguridad social, no sabemos todavía si nos van a despedir o ya fuimos despedidas. Somos las que nos quedamos sin ingresos y nunca cobramos el IFE. Si nos enfermamos y faltamos nos despiden, si nos organizamos nos amenazan.

La cuarentena como principal medida del gobierno para evitar la propagación del virus sin un plan serio de salud es un camino sin brújula. En Bahía empeoran las condiciones de vida aún más en los barrios en situación de emergencia y no se avanza en la unificación del sistema privado y público de salud bajo el control de sus trabajadores ni testeos masivos para cortar el contagio.

En este contexto las mujeres nos encontramos expuestas a situaciones de violencia que a veces llegan a femicidios como el caso de Susana Melo en la cuidad, por quien exigimos justicia o como el caso de Rosalía por quien seguimos pidiendo su libertad y absolución. A pesar de que los casos se multiplican no hay protocolos de actuación por parte del Ministerio de Género a la altura de la circunstancias.

En lo que sí se actuó rápidamente fue en llenar las calles de policías, lo que terminó dando por resultado miles de denuncias como la de Florencia Morales, detenida en San Luis por romper la cuarentena que luego apareció muerta dentro de la misma comisaria 25 de Santa Rosa de Conlara. A esto se suma la desaparición forzada seguida de muerte de Luis Espinoza por parte de la policía de Manzur; y un nuevo caso en Chaco donde la policía de Capitanich de la comisaría tercera de la localidad de Fontana, golpeó, detuvo y abusó sexualmente a mujeres integrantes de la comunidad Qom.

Los patrones aprovechan el escenario que les deja el gobierno. Subsidian a las empresas mientras el gobierno nacional se hace cargo de pagar los sueldos de la “miserable” Techint, Clarín, La Nación y la Sociedad Rural. Alberto Fernández gano las elecciones planteando que iba a poner “plata en los bolsillos de la gente” y desde el comienzo de su gobierno hasta acá lo que crecieron fueron los despidos, los recortes del 25% del salario pactado con la burocracia sindical de la CGT y la estafa a los jubilados. Ni hablar de la multa de $5000 pesos que puso Axel Kicillof para las empresas que despidan, mostrando que el DNU antidespidos del gobierno nacional es papel mojado. Mientras tanto siguen negociando la deuda odiosa.

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Este 3J en Bahía volvemos a las calles, con distanciamiento social y tomando las precauciones necesarias para cuidarnos entre nosotras. Nos organizarnos para poder cobrar la IFE mientras exigimos salarios de cuarentena de $30.000 que nos permitan vivir dignamente. No se puede seguir negociando la deuda mientras crece el hambre y la desocupación. Hay que acompañar el no pago con la nacionalización de la banca, poner bajo administración de las y los trabajadores del sistema bancario los movimientos de dinero y así cortar la fuga millonaria y la especulación. También hay que avanzar en la nacionalización de todo lo que se exporta y poner impuestos a los grandes empresarios y pulpos exportadores. Nos convocamos a las 15hs en el Municipio para levantar nuestra voz bien alto:

• ¡Basta de violencia machista, femicidios y travesticidios! Refugios para todas las mujeres y compañerxs trans en situación de violencia ¡Justicia por Susana Melo! ¡Justicia por Katherine Moscoso! El Estado es responsable.

• ¡Basta de criminalización de la pobreza! Libertad y absolución para Rosalía

• Aborto legal YA. Exigimos el tratamiento y la aprobación del proyecto de ley por la interrupción voluntaria del embarazo de la Campaña Nacional por el derecho al aborto ¡Separación de la iglesia del estado!

• ¡Basta de despidos y precarización laboral! Salarios de cuarentena de $30.000 en base el no pago de la deuda. #Ladeudaesconnosotrxs ¡Cupo laboral trans!