Aumenta los despidos, pero también la suspensión, superando las 700.000 suspensiones de trabajadores y trabajadoras, que están amparadas por la Ley de Protección del Empleo.
Sábado 18 de abril de 2020
La ministra del trabajo María José Zaldívar, el día de ayer entregó al fin los datos de despedidos y suspendidos de marzo, donde los números no son para nada favorable, obviamente para el pueblo trabajador que nuevamente es golpeado por lo intereses de las grandes empresas.
Mientras que quienes lideran la tabla de quienes han cometido mayores despidos han sido las grandes empresas privadas, correspondiente a un 57% de todos los despidos hechos durante marzo, donde los protagonistas son los sectores de alojamiento y comida con un aumento de un 93% de despidos en comparación a febrero, luego le siguen el comercio con un aumento del 41,9%, la construcción con un 41,5% y los servicios administrativos con un 25,6%.
Llegaron a casi 300.000 las cartas de despidos durante el mes de marzo, donde la mayoría se encuentran en la suspensión de contrato, que también tuvo un aumento del 44% en comparación a marzo del año pasado, pero desde otra vereda se vé la situación de 786.790 trabajadores suspendidos acogidos por la Ley de Protección del Empleo, votada por sector del Frente Amplio, como Revolución Democrática, también fue votada por el Partido Comunista, junto a la derecha como la UDI y RN.
Casi 800.000 suspendidos, es la opción que tomaron 56.986 empresas, entre ellas las multinacionales como H&M, Ripley, Starbucks, Cencosud, Mc’Donald, Burger King, entre otras, todas justificándose como pequeñas pymes. Todo esto en medio de la crisis que vivimos, donde las empresas buscan salvarse, sin importar el futuro de los y las trabajadoras, esto apoyado por el gobierno que solo haciendo un pequeño llamado a no abusar de esta ley.
¿Pero qué significa la suspensión de los trabajos?
En simples términos la suspensión es un despido durante la crisis, en teoría los y las trabajadoras suspendidas volverían a ser incorporados al finalizar la crisis sanitaria, pero nadie nos asegura esto tampoco. O sea es un despido que deja más en la incertidumbre a los y las trabajadoras. Esta es la medida que tomaron los empresarios para no pagar las indemnización, ni sueldos, ni nada y tampoco así perder la fuerza de trabajo cuando se vuelva a la "normalidad".
La suspensión es otra muestra más de la precarización en las vidas de los y las trabajadoras y en sus familias, en esta ocasión dejan a casi 800.000 trabajadores y trabajadoras, valiéndose de su seguro cesantía y un bono de 50.000 pesos.
¿Y la CUT dónde está?
La CUT nuevamente brilla por su ausencia, hasta ahora solo ha hecho una conferencia donde técnicamente no dijeron nada y bueno su presidenta ganó un premio a la lucha sindical. Pero siguen manteniendo una tregua con el gobierno que ha permitido que se profundice la precarización de la vida de los y las trabajadoras.
¡Basta de treguas! Que la crisis la paguen los empresarios y no nosotros el pueblo trabajador, es necesario que los grandes sindicatos y la CUT tomen acciones para impulsar un plan urgente ante esta crisis y no ser nuevamente los y las trabajadoras quienes paguemos la crisis, todo esto contemplando la derogación de todas las iniciativas legales del gobierno durante la crisis y la prohibición de los despidos, además del 100% del pago de sueldos y la reincorporación de las y los trabajadores despedidos y suspendidos. Esto también en perspectiva que los lugares de trabajo sean tomados por sus trabajadores y que estos sean dispuestos a enfrentar la crisis. ¡Nuestras vidas valen más que sus ganancias!
Víctor Ibañez De la Hoz
Joven trabajador militante del PTR y militante de Vencer
