Solo reanudarán clases 106 escuelas de las más de 9 mil escuelas que existen en la Ciudad de México, el resto esperarán a tener un certificado de seguridad estructural.
Lunes 25 de septiembre de 2017
En conferencia de prensa el titular de la Secretaria de Educación Pública, Aurelio Nuño Meyer y el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, comentaron que las escuelas públicas y privadas de educación básica necesitaran contar con un certificado de seguridad estructural que garantice que no hay riesgo para la integridad de la comunidad estudiantil para poder reanudar clases, según el titular de la SEP, nadie obligará a estudiantes y maestros a volver a las aulas.
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El certificado de seguridad estructural deberá ser avalado por la SEP, de modo que las escuelas que hayan hecho el certificado de manera independiente tendrán que ir a la SEP para que sea validado o de lo contrario no podrán regresar a clases.
Según Miguel Ángel Mancera, las clases en las delegaciones Iztapalapa, Xochimilco, Tlalpan, Benit Juárez, Cuauhtémoc y Tláhuac no se reanudarán hasta que las labores de rescate y remoción de escombros culminen.
La tarea de revisar cada una de las más de 9 mil escuelas podría tardar hasta dos semanas, sin embargo Aurelio Nuño hizo énfasis en que no se perderá el año escolar, seguramente a costa de recorrer el calendario escolar semanas o de cargar, aún más, la ardua labor que miles de docentes de educación básica hacen a diario.
Las escuelas que ya tienen certificado y vuelven a clases son 56 públicas y 26 privadas de educación básica y 21 planteles de educación media superior.
En el caso de los estados de Hidalgo, Michoacán, Oaxaca, Puebla, Tlaxcala y Estado de México, el regreso a clases será escalonado en tanto se sigan revisando las escuelas.
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Sin embargo, pese a la conferencia de prensa ofrecida por Mancera y Nuño, la población sigue preocupada por la integridad física de maestros y estudiantes, pues pese a los certificados, nada garantiza que los 3mil edificios que están a punto de derrumbarse por toda la ciudad no sean un factor de riesgo fuera de las aulas, como dentro.
Solo por poner un ejemplo, el día de ayer en la colonia Guerrero, una cúpula de una iglesia se desplomó sobre una escuela que estaba a su costado.
Es claro que el llamado a volver a la normalidad que el gobierno tanto federal como local no puede llevarse adelante, miles de personas siguen afectadas, miles han quedado sin casa y cientos son los muertos por esta catástrofe natural pero que tiene un trasfondo de corrupción con las inmobiliarias y con los certificados de seguridad que, como en el caso de la escuela Enrique Rebsamen, quedan al desnudo tras el sismo.