El año pasado las autoridades del Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud (CICS), unidad Santo Tomás del IPN, en un intento desesperado por deshacer el surgimiento de una fuerte organización contra el acoso y las violencias machistas, criminalizaron y hostigaron a quienes decidieron levantar la voz.
Jueves 1ro de febrero de 2018
Las alarmantes cifras de casos de violencia contra las mujeres en México motivaron a estudiantes del Centro Interdisciplinario de Ciencias de la Salud (CICS), unidad Santo Tomás del Instituto Politénico Nacional (IPN) a elegir el fenómeno del feminicidio como tema de práctica para el tercer parcial de la materia de Sexualidad Humana del 4° semestre la carrera de psicología. Entre las actividades realizadas se elaboró una campaña a través de actividades artísticas y culturales que mostrarán el recrudecimiento de dicho fenómeno social para concientizar a toda la comunidad del plantel.
Durante la presentación de la campaña ocurrieron ataques directos a las estudiantes durante sus actividades, por parte de algunos profesores involucrados e inclusive de compañeros. Como medida organizativa se decidió crear un programa conjunto que incluyera a todos los grupos para realizar representaciones teatrales, danza y música. Ante al permanente hostigamiento de una parte de estudiantes y profesores envalentonados para menospreciar y denigrar las actividades, los grupos en conjunto denunciaron el hostigamiento mediante un cartel que decía “Gracias prof@s de psicología por su apatía a nuestra realidad".
La existencia del cartel originó una serie de denuncias espontaneas escritas con los nombres de profesores que constantemente violentan de manera física o verbal a las compañeras.
El Instituto, como siempre, actuó dando la espalda a sus estudiantes y cobijando a los acusados.
El intento de organización provocó que autoridades actuaran con medidas contra las profesoras que imparten la materia, utilizando medidas como: hostigamiento laboral, amenazas físicas y legales. Por su parte, a toda la generación de estudiantes los amenazaron en “búsqueda de la raíz del problema". Las autoridades exigían nombres de “culpables”, cuando ellos saben bien quiénes son los profesores que tienen denuncias por acoso y los cobijan, imponiendo un sistema de corrupción e impunidad que les permite mantenernos aleccionadas y temerosas de denunciar.
Después del surgimiento de asambleas en el plantel, tanto el Abogado General como la Defensoría de los Derechos Politécnicos deslegitimaron las acusaciones hechas por las estudiantes, y mediante la individualización de los casos y el desgaste del proceso de las denuncias evadieron descaradamente la responsabilidad de la Institución re-victimizando a quienes denuncian.
Más casos se repiten por todo el Politécnico
La denuncia expresó la realidad que vivimos las estudiantes del Politécnico, pues, ni con el departamento de “Red con perspectiva de género”, han logrado que el IPN sea una “zona libre de violencia”. Casos de acoso por parte de autoridades y profesores a estudiantes y profesoras son una realidad en la mayoría de las escuelas del IPN. Los casos se cuentan por centenas en algunas escuelas, ya sean de medio superior o superior.
La respuesta de las autoridades se repite una y otra vez: las denuncias no proceden por falta de pruebas y cuando los casos ya son muy descarados solo cambian de plantel por un tiempo al denunciado. Aun así, alardean al decir que han realizado medidas para hacer del Instituto una “zona libre de violencia”.
Surge Pan y Rosas en el CICS
Es por eso que hemos decidido decir basta a la confianza en las autoridades, decimos que no permitiremos que una más de nosotras sea violentada en nuestras universidades. Hemos decidido firmemente luchar contra el acoso en nuestros centros de estudio, pero no solo eso, no permitiremos que la vida de otra de nosotras sea arrebatada en la línea de producción dentro de las fábricas, a manos del feminicidio, la militarización y la precarización laboral. Invitamos a organizarse a miles de mujeres con nosotras, para que el #NiUnaMenos sea una realidad.
No depositemos nuestra confianza en los partidos del régimen que utilizan nuestras demandas como botín electoral, aún más en tiempo de elecciones, ni tampoco en las instituciones, como las autoridades del IPN, que son incapaces de resolverlas. Construyamos una organización independiente que luche con las mujeres trabajadoras, estudiantes, jóvenes, amas de casa, indígenas, etc., para que nunca dejemos de gritar y pelar por todo nuestro derecho al pan, pero también a un mundo mejor.
Te invitamos a hacerte parte de los comités que ya están en el IPN: CECyT 6, ESIQIE, UPIITA, ESIME Ticomán y CICS-UST. Convocamos a las estudiantes y trabajadoras politécnicas a las actividades que estaremos llevando a cabo en nuestras escuelas para coordinar un plan de lucha contra el acoso y rumbo a un 8 de marzo combativo y en las calles.