Juventud. A propósito de la campaña FECh “El pueblo ayuda al pueblo”

Estamos a 6 meses desde el 18 de octubre, día que inició la rebelión, y hace casi un mes en que el coronavirus llegó a Chile para quedarse. Como estudiante de la universidad, con cientos y miles de compañeres fuimos parte de las manifestaciones y organizaciones que se enfrentaron contra los milicos, contra los pacos, contra Piñera y sobre todo contra la asquerosa y miserable herencia pinochetista. Hoy el desafío que tenemos es seguir en la primera línea y pelear contra la pandemia.

A pesar de que muchas facultades fueron vaciadas durante la rebelión por el actuar de los centros de estudiantes y federaciones que preferían pedirle a los rectores pronunciarse, les estudiantes nos sumamos a la lucha, sin embargo si hubiésemos puesto a disposición del pueblo toda esa infraestructura y hubiéramos abierto las puertas de las universidades a la causa, sin duda hubiésemos podido fortalecer mucho más el movimiento, prueba de esto fue la Toma de la Casa Central. Qué decir de les estudiantes secundaries que encendieron la chispa para que el pueblo se decidiera y saliera a protestar. Y desde la universidad, centros de formación técnica e institutos claro que tenemos que aportar, ya no solamente nuestros cuerpos que conformaban parte de la primera línea, sino que el conocimiento y herramientas que nos dan.

Mascarillas, alcohol gel, camillas, respiradores mecánicos, EPP de todo tipo podemos producir para abastecer a los hospitales públicos, como el Hospital Barros Luco en San Miguel, donde lxs funcionarixs de la salud tiene que comprar en la calle mascarillas para poder protegerse debido a que el gobierno les entrega 1 diaria. Nuestras manos tienen que apoyar el trabajo de esxs trabajadrxs, levantando comités de higiene donde poder producir EPP, desde cada facultad, universidad, hospital, etc. Como es el caso de estudiantes de medicina en Antofagasta que en conjunto al Comité de Emergencia y Resguardo están haciendo esta tarea.

La Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile está levantando una campaña de recolección de dinero para llevar insumos a la Cárcel de Mujeres de San Joaquín y a las poblaciones de Lo Hermida y Bajos de Mena, sectores proletarios y muy precarizados. Que como medida de emergencia es necesaria, pero no podemos quedarnos solamente en eso, porque la responsabilidad de asegurar el bienestar general es del gobierno, pero como sabemos que esto no es así y que de hecho este gobierno no se preocupa de nada más que de las ganancias de sus amigos empresarios, pasando leyes con el apoyo del Partido Comunista y Revolución Democrática, demostrando así su solidaridad con los empresarios y no con más de 1 millón de trabajadores que han sido suspendidxs o despedidxs, donde hay miles de estudiantes obligades a trabajar para poder estudiar.

O de pasar leyes represivas y fortalecer a carabineros para poder enfrentarnos más brutalmente si protestamos en contra de las medidas criminales de gobierno para enfrentar la crisis y nos volvemos a movilizar luego de este entretiempo forzado.

La Confech no se ha pronunciado para repudiar esto y organizar a les estudiantes, ahora que el gobierno pretende retomar las clases escolares arriesgando la vida de cientos de familias, o que quiere abrir los malls para obligar a más trabajadores de sectores no esenciales a arriesgar su vida por los bolsillos de unos pocos.

Tenemos que levantar asambleas de carreras y facultades para organizarnos y coordinarnos, para poner nuestras manos al servicio de la lucha contra la pandemia. Pensar las formas más novedosas para poder ligarnos a la primera línea de la salud. Exigir que la federación ponga todos sus fondos, así como rebajar los sueldos millonarios de las autoridades, ya que entre el rector y los 14 decanos de la U de Chile se gastan 90 millones de pesos mensuales. ¡90 MILLONES MENSUALES! Todos los laboratorios, talleres y manos de quienes queramos para enfrentar a este gobierno y a la pandemia. Con pequeñas colectas no nos alcanzará, necesitamos nuestras fuerzas y los recursos de la Universidad.