Este viernes el ministro de educación Raúl Figueroa estuvo presente en nuestra ciudad visitando algunos colegios en conjunto con diversas autoridades de la ciudad, pero ¿a qué vino el ministro?
Domingo 25 de abril de 2021
En una semana bastante convulsionada, luego de que Piñera recurriera al Tribunal Constitucional para evitar el tercer retiro del 10%, se presentó este viernes en nuestra ciudad el actual ministro de educación, Raúl Figueroa.
¿A qué vino el ministro?
La segunda ola del COVID ha golpeado violentamente a las familias trabajadoras y pobres en el país. Las cifras superan con creces y han alcanzado los más de 9 mil contagios por día y las cerca de 30 mil muertes.
En este sentido el ministro al igual que en otras oportunidades vino a plantear el retorno a clases, como si hoy fuese una discusión atingente. En medio de la crisis sanitaria y con un sistema de educación precario, se hace imposible llevar adelante las clases. A esto se le suma que en la ciudad hay alrededor de 10 mil estudiantes en la educación pública, que no han podido acceder a las clases virtuales por diversos motivos. Sin embargo, es fácil llenarse la boca hablando del derecho a la educación e incluso incluirlo en la constitución, pero no lo garantizan.
Si bien se comprometió a entregar algunos dispositivos electrónicos para que las y los estudiantes puedan ingresar a sus clases, sólo se habló de liceos técnicos profesionales. Uno de sus estudiantes comentaba que, ““en un liceo técnico-profesional es muy importante contar con insumos, equipamiento y mobiliarios pertinentes a los contextos laborales”, considerando los pocos equipos que existen en sus establecimiento educacionales.
No solo existen estos problemas, en la ciudad la tasa de desempleo aumentó durante el 2020 y muchos trabajadores vieron sus contratos suspendidos por la ley de suspensión del empleo, firmada desde la UDI al Partido Comunista. Creció el trabajo informal, aumentaron los niveles de pobreza y los campamentos. Como se puede ver, el problema para no acceder a clases, incluso va más allá de la entrega de dispositivos.
La visita del ministro no sirvió para resolver los problemas más profundos de la educación en la ciudad, él jamás tuvo esa intención. Como gobierno han tenido una línea completamente contraria, siendo responsables directo de la gran catástrofe sanitaria con la llegada de la pandemia. El agobio y el estrés crece en el conjunto del profesorado, y en las familias de nuestros estudiantes. No podemos seguir con la insistencia del retorno a clases presenciales como constantemente busca imponer el ministro. Ya nos expuso a comienzo del año escolar y las consecuencias las estamos viviendo hoy.
De camino al paro sanitario del 30 de abril, el colegio de profesores y la CUT debe llamar a la conformación de comités de base por cada lugar de trabajo, para discutir y coordinar la movilización del 30 de abril. Y para que esta no sea una nueva movilización testimonial de la CUT, sino el punto de partida por la caída revolucionaria del gobierno y todo el régimen pinochetista. Esta será la única forma de conquistar una asamblea libre y soberana, donde nuestras vidas se pongan al frente como prioridad y no sus ganancias, como busca constantemente hacerlo el ministro de educación y todo el gobierno de Sebastián Piñera.
