En el Museo de la Memoria se dieron cita la realizadora Gabi Jaime y la protagonista Alejandrina Barry junto a personalidades de derechos humanos.
Lunes 27 de junio de 2016 09:39
Con la presencia de varias personalidades de Derechos Humanos y decenas de espectadores se presentó la película “La construcción del enemigo”, en el marco de la Muestra "A 40 años del Plan Cóndor. Cine para no olvidar", muestra de cine por la memoria, contra la impunidad y el olvido. Al finalizar, disertaron desde el panel la realizadora Gabi Jaime, la protagonista de la película Alejandrina Barry, dirigente del PTS y miembro del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos, Juane Basso periodista e integrante de la agrupación Hijos.
En el debate, luego de la emotiva proyección de la película, la realizadora Gabi Jaime expresó: “La película tiene dos objetivos, uno es el homenaje no de mármol o de grabado, a esos seres que se los construyó como enemigos y eran militantes y que quisieron que fueran víctimas pero no son víctimas en tanto y en cuanto nosotros salgamos a hacer lo que ellos querían que era cambiar este mundo de raíz y por otro lado, mostrar la construcción que hicieron los medios de comunicación durante la dictadura cívico militar y que sigue hoy en día".
La realizadora también analizó el rol actual de los medios de comunicación, "son una herramienta de los poderes de turno, entonces hoy en día el enemigo no son solo los militantes populares que salen a luchar sino que son los trabajadores que salen a luchar por sus despidos, los docentes que salen a pedir por la educación pública, los pibes de los barrios marginados que tienen gorrita. Siempre hay un enemigo al que se construye y eso intentamos mostrar desde la peli, las operaciones de prensa no son casuales”.
Por su parte, Alejandrina Barry se refirió al trabajo de la película, resaltando la importancia de mostrar la verdad en relación a lo que significó la enorme campaña de propaganda que hicieron los militares junto a los medios de comunicación. “Justamente se reflejó en mi caso a la edad de tres años, donde hicieron campaña con acciones psicológicas, intentaron convertir a mis viejos en fabricadores de huérfanos, pero era una práctica cotidiana de la dictadura donde detrás de eso hay una causa. La película recoge muchos años de investigación y es un aporte a mostrar la verdad de la historia, quienes eran mis viejos y para la lucha por condenar a los responsables.”
Al refererirse sobre Rosario, Alejandrina explicó la importancia de difundirla en esta ciudad porque sus padres militaron en clandestinidad acá, donde dejaron sus huellas, y es una de las cosas que se siguen investigando. "Este es un lugar donde yo he venido por muchas otras cuestiones que tienen que ver con las violaciones a los derechos humanos como es la enorme cantidad de casos de gatillo fácil que hay en esta provincia. Acá está Luciana Escobar presente que es una gran compañera de lucha, con quien hace poco dimos una charla juntas demostrando la continuidad de la impunidad y represión de ayer y de hoy, como también con Norma Ríos y Florencia Del Negro de la APDH que son compañeras con las cuales hemos venido luchando durante todos estos años", manifestó. Rosario muestra esta continuidad en la represión y en la impunidad que siguen teniendo estas policías provinciales amparadas por el poder político, que siguen deteniendo y asesinando a los jóvenes.
Por otro lado, expresó que para ella lo más importante es lo que se refleja al final de la película, "al revés de lo que querían los militares y los grandes medios de comunicación que hicieron los operativos de prensa para que yo odiara a mis viejos, el impacto que tuvo en mí ver las revistas y diarios de aquellos años, fue todo lo contrario. Inmediatamente la bronca y el odio me llevaron a los 13 años a la militancia, por el juicio y castigo a cada uno de los que habían llevado adelante este genocidio tanto los militares como los grandes empresarios y particularmente la prensa; pero también a la militancia revolucionaria. A diferencia de lo que los medios quisieron imponer, yo nunca estuve sola. A mí me crio mi abuela materna y desde muy chica, todas las investigaciones, la pelea por el juicio y castigo, las causas que llevamos adelante las llevé junto con mi familia, mis compañeros de militancia del PTS y del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos, y particularmente con Myriam Bregman quién es mi abogada en las causas que soy querellante. es decir, siempre fui parte de una historia y de una lucha colectiva. Lo que quisieron lograr, se transformó en su contrario y toda esta pelea se transformó en mí en ganas de transformar de raíz esta sociedad retomando y reivindicando la lucha de mis viejos y
lo mejor de la militancia de los 70".
Alejandrina también hizo hincapié en el rol actual de los medios masivos: "Hoy los grandes empresarios y los medios de comunicación son los intocables en todos los juicios, creo que la película sirve para mostrar justamente esa continuidad y a su vez, la militancia para seguir con esta pelea que no es individual sino colectiva por conseguir el castigo. También es una película que muestra las continuidades en la impunidad que se quiso generar sobre los militares y civiles y que no tenía solo que ver con que estén libres sino con formar parte del aparato represivo, y centralmente con ser los grandes dueños del país. Lo vemos claramente con este gobierno que es parte de los empresarios que llevaron adelante el golpe. La familia Macri pasó en la dictadura de tener 7 a 47 empresas y es un gobierno donde se ve claramente en toda su política el intento de volver a reivindicar la teoría de los dos demonios en contra de la cual luchamos en las calles muchísimos años, frenar los juicios y por supuesto, salvar a sus amigos que son los grandes empresarios. La película también muestra toda la continuidad que también hubo con el gobierno anterior. Yo soy parte de una organización que ha mantenido una posición independiente reivindicando los juicios a los genocidas porque son parte de nuestra lucha durante muchos años, pero también vimos en la última parte de la película como eso se combinó con la lucha contra una enorme política represiva del gobierno anterior. Hemos denunciamos el Proyecto X que es un proyecto de espionaje estatal directamente vinculado a espiar a los trabajadores, sectores populares y a la izquierda. Las represiones sufridas por los trabajadores como en Lear, como también se ve en la película, donde mi compañera Victoria Moyano nieta restituida, es detenida y golpeada por esa gendarmería. La presencia de Alejandrina se dio a pocos días de la brutal represión del gobierno de Cambiemos en el día de la bandera a militantes opositores, lo que manifestó como un absoluto repudio.
Con aplausos y lágrimas de algunos de los presentes terminó la presentación que se repetirá nuevamente en agosto en el cine El Cairo. Una verdadera documentación de la lucha de memoria, verdad y justicia por todos los desaparecidos en la ultima dictadura militar argentina y de demostración de la militancia de incansables luchadoras como Alejandrina que también pelean contra la impunidad de la represión actual.
