Conferencia Matutina. AMLO: inversión privada, ONU a Venezuela, respeto a la autonomía de la UAM

La conferencia matutina de AMLO de este martes no partió de un eje, como de costumbre, sino que arrancó directamente con las preguntas de los periodistas. Entre los temas abordados destacamos los siguientes.

Se cuestionó al Presidente sobre una reunión que tuvo ayer con empresarios del sector minero, energético y de comunicaciones, particularmente si había hablado con Germán Larrea sobre Pasta de Conchos, en referencia a que la semana pasada López Obrador dijo que le haría una propuesta al empresario de Grupo México para que llevara a cabo exploraciones para recuperar los cuerpos de los mineros que quedaron sepultados en 2006 por falta de condiciones de seguridad.

El Presidente respondió que no había hablado de eso con Germán Larrea, que la reunión tuvo el objetivo de generar confianza y estimular la inversión, tanto nacional como extranjera, pues no alcanzaría con la inversión pública para crecer como lo necesita el país. El objetivo del gobierno es un crecimiento promedio anual del 4%.

Como es sabido, en la política económica del gobierno la iniciativa privada tiene un lugar central. En consecuencia, lejos de cualquier plan de nacionalización de sectores estratégicos de la industria, el crecimiento económico se vincula con la inversión privada.

La inversión pública en México es de las más bajas del mundo, aseguró el mandatario. El crecimiento, de la mano de los empresarios (y sin corrupción, como pretende AMLO), sería la base para que haya bienestar, paz y tranquilidad; la pregunta es: ¿para quiénes?

Cuestionado sobre la solicitud del gobierno estadounidense para que reconozca a Guaidó en Venezuela, López Obrador ratificó la postura de no intervención, de negociación y diálogo entre las partes.

Pero agregó un llamado a que, en la cuestión de la ayuda humanitaria (que la derecha y el imperialismo usan como caballito de Troya para intentar dividir a las fuerzas armadas venezolanas y avanzar con sus planes golpistas), se acuda a la ONU y la Cruz Roja.

Lo anterior, en consonancia con la comparación que hizo la semana pasada entre los Cascos Azules de la ONU, que con el pretexto de la ayuda humanitaria han violado infinidad de veces los derechos humanos en los países a los que llegan, con la Guardia Nacional que espera sea ya aprobada por la Cámara de Diputados.

Es respuesta a si está de acuerdo con que, en el caso de la UAM (cuyos trabajadores están en huelga), haya incrementos salariales, el Presidente se limitó a decir: “nosotros cumplimos con las universidades, con el compromiso de que, cuando menos iban a tener el mismo presupuesto más inflación”. Eludió diciendo que “tiene que ver con la política de cada universidad y ser respetuoso de las autonomías”, para pasar rápidamente a la siguiente pregunta.

Muy a tono con la política para las universidades públicas de “hacer más con menos”, mientras que anunció que, sobre la Guardia Nacional, ya se tiene aprobado el presupuesto para que comience a operar, y que para este año se va a contar con 80mil elementos, con 100mil para el próximo y con 125mil para el 2021.

Para finalizar, volvió con las acusaciones de provocadores hacia los pobladores de Morelos que quemaron urnas el sábado pasado, en protesta por la consulta impuesta por el gobierno sobre la termoeléctrica de Huexca, luego del asesinato de Samir Flores.

Insistiendo con el discurso de que las organizaciones radicales o de izquierda son conservadoras y de que los extremos suelen tocarse, dijo respecto a los movimientos sociales: “no votar fue siempre, y portarse bien con los gobiernos de derecha, y ahora llegamos nosotros, como dice la canción de Calle 13, todos a portarnos mal”, negando con unas cuantas palabras la lucha social de los últimos sexenios.

Como dijo un obrero del gran movimiento 20/32 de Matamoros, nos prometieron un cambio y aquí estamos nosotros luchando por ese cambio.