La conferencia de este viernes el presidente López Obrador justificó la presencia de más de 6 mil elementos de la Guardia Nacional en el metro capitalino a la vez que dirigió dardos al "renacimiento" de la coalición PRI-PAN-PRD.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Viernes 13 de enero de 2023
Luego del accidente del pasado sábado 7 de enero en el que perdió la vida una joven universitaria, la conferencia de este viernes inició con AMLO justificando la presencia de más de 6 mil elementos de la Guardia Nacional. Según su explicación, "la Guardia Nacional es para proteger a la gente y no le hace que nos critiquen".
¡Cómo no vamos a utilizar la Guardia Nacional si se trata de proteger a la gente del Metro! ¿Por qué no hacerlo? Qué tal que sí sean actos provocados y lo que quieran es que suceda una desgracia mayor. ¿No lo vamos a evitar?
Haciendo eco de la campaña en 2006, el obradorismo alega que las críticas y oposiciones a sus políticas se tratarían de "un complot" (como en su momento acusó el mismo López Obrador). Pero basta con usar la famosa navaja de Ockham: la explicación más simple suele ser la más probable. ¿Será realmente un complot y sabotaje por parte de entes extraños ligados a la derecha o efectos de la reducción del presupuesto del transporte?
El día de ayer, la propia Jefa de Gobierno de la ciudad sostenía que no había reducción presupuestal al Metro, pero los propios datos oficiales revelan que el presupuesto del mismo se ha visto reducido en un 17% desde 2017.
El presidente prosiguió señalando, ante la reconformación de la coalición PRI-PAN-PRD, "creo que está bien, están en su derecho y ya no es nota, desde hace tiempo están agrupados; es un bloque conservador, reaccionario" y que "son gente con mucho dinero que se han beneficiado de la política neoliberal". También lanzó dardos a la organizaciones de derechos humanos al sostener que “se fueron creando durante el periodo de mayor corrupción en la historia de México”.
La lógica presidencial se maneja con medias verdades. Dice que “hay países donde la derecha tiene control absoluto”, lo cual es verdad, pero cabe preguntarse el porqué de las acusaciones de boicot y sabotaje. Cosa además muy curiosa viniendo de quienes —como él mismo— han gobernado la capital por varios años.
AMLO acusa quizás demasiado a los simpatizantes de la derecha, lo cual no estaría mal de no ser por el acompañante incómodo de ese trío: el PRD. Siendo que el propio AMLO fungió como presidente de ese partido antes de ser elegido como Jefe de Gobierno en el año 2000, debería ser consciente del uso oportunista del aparato de ese partido.
"Hay una especie de aristocracia en el centro de Coyoacán", sostuvo en la conferencia matutina, lo cual es verdad, pero tampoco hay que olvidar que en esa alcaldía existen muchos sectores populares como el Pedregal de Santo Domingo, donde el PRD, bien que mal a pesar de sus bajas cifras de votación, mantiene presencia y explica en parte la fuerte elección de candidatos panistas en esa demarcación.
La agitación de la alianza PRI-PAN-PRD quita el foco a la reducción presupuestal al transporte que, desde 2020 a la fecha, ha generado un accidente por año (choque en Tacubaya, incendio del puesto de control, caída de la Línea 12 y el choque en la estación La Raza). En cambio, decidió enfocar la crítica al despliegue de la GN para contrastarla con la del exfuncionario calderonista, el controvertido Genaro García Luna y su Policía Federal.
"Presencia de la autoridad y protección a los ciudadanos, que sientan que hay vigilancia y se les está protegiendo" es la justificación presidencial para enviar cuerpos que tiene denuncias de violación de derechos humanos.