Al igual que la mayoría de las empresas del sector automotriz, las y los trabajadores de General Motors San Luis deben enfrentar constantemente el abuso de los patrones quienes echan mano de las burocracias sindicales, conocidas como charros, que secuestran los sindicatos para servir a los patrones en contra de los trabajadores.
Lunes 15 de mayo de 2023
Desde hace casi un año en la planta de la transnacional estadounidense en San Luis han habido descontentos derivados de la extenuante carga laboral, la carga ilegal de los paros técnicos al bolsillo de las familias trabajadoras e incluso se organizó un paro, ya que la empresa y charros pretendieron robar el pago festivo del día de reyes únicamente con horas extra.
Recientemente, quienes laboran en esta empresa, han enfrentado una trampa más en donde la patronal quiere seguir cargando la crisis económica sobre sus hombros, rebajando la repartición de utilidades a pagos miserables que poco tienen que ver con los niveles de producción y las millonarias ganancias que generan la venta de vehículos.
Para justificar el reparto de utilidades, la empresa utiliza a los charros para simular la revisión de la carátula de utilidades con la finalidad de que nadie pueda protestar. A su vez, los charros amenazan a cualquiera que quiera cuestionarlos y cierran las puertas para quien quisiera saber más sobre el proceso. De esta manera, atentan abiertamente contra las leyes laborales que dictan la participación de la base obrera en la revisión de la carátula. Esto es bien sabido por las autoridades, pero para ellas la inversión extranjera está por encima de un salario digno y el bienestar de las familias.
La crisis económica a nivel mundial ha hecho que los productos de la canasta básica se eleven en todo el planeta. México atraviesa esta crisis con mayor presión sobre las y los trabajadores por parte de los patrones. Despidos, reducción de salarios, horarios extenuantes y acoso laboral son algunos de los problemas del día a día de millones.
En General Motors San Luis Potosí es importante que los miles de trabajadores se den cuenta de que el sindicato no es una estructura hecha para robarles sus cuotas, sino una herramienta de organización y lucha que ha sido secuestrada por un pequeño grupo de charros que no les permiten dirigir su propia organización.
En General Motors San Luis Potosí es importante que los miles de trabajadores se den cuenta de que el sindicato no es una estructura hecha para robarles sus cuotas, sino una herramienta de organización y lucha que ha sido secuestrada por un pequeño grupo de charros que no les permiten dirigir su propia organización.
Es por esto que lo más importante es que comiencen a auto organizarse por grupos, equipos, y definan la manera más adecuada para echar a los charros sindicales y que reconstruyan el sindicato, por un sindicato verdaderamente democrático e independiente de la influencia de los patrones o cualquier otra fuerza con intereses ajenos a los de las y los trabajadores.
Se debe de analizar el resto de las experiencias del país para darse cuenta de que la solución no viene de otras centrales, confederaciones o sindicatos que se digan “amigos” pero que en realidad vienen a buscar el control político y las cuotas que generan con su propio esfuerzo las y los trabajadores. La única manera efectiva de avanzar es mediante la auto organización democrática en su planta, apoyándose de otros trabajadores en lucha de San Luis, el país y el mundo.
“El proletariado no debe de creer nada a ciegas, debe juzgar a cada partido y cada organización por su trabajo, los obreros deben de desconfiar doblemente de los aspirantes a dirigentes que actúan de incognito, pretendiendo hacerles creer que no necesitan ninguna dirección”. León Trotsky
