La fundación "Por México Hoy" de Cuauhtémoc Cárdenas reunió a rectores, funcionarios y académicos de 17 universidades del país para presentar un movimiento que busca ser un espacio para “reflexiones, ideas y propuestas sobre cómo enfrentar los desafíos de México”, según el presidente de la fundación, Alejandro Chanona.
Lunes 14 de agosto de 2017
Hace unos días, Enrique Graue y Enrique Fernández Fassnacht, rector de la UNAM y director general del IPN respectivamente, debatieron por televisión sobre la educación superior en el siglo XXI. Sorprendió que el argumento más recurrente para referirse a la insuficiente capacidad de garantizar educación para la juventud, fuera “el privilegio” de acceder tras “superar” al resto de los “rechazados”.
Hoy la falta de acceso a la educación, con 9 de cada 10 jóvenes aspirantes excluidos de instituciones superiores es un problema grave para la juventud.
El gobierno y las autoridades de las instituciones educativas son responsables. El reducido presupuesto destinado al sector, sólo un 5.6% del PIB, es totalmente insuficiente pero responde a una plan de conjunto para privatizar el sector y atacar las conquistas del gremio docente. Además, hay una situación de violencia y precarización laboral que se agudiza.
Lejos de denunciar al gobierno y los planes de las empresas para tecnificar y privatizar la educación, tanto Graue como Fassnacht han destacado en atacar la organización estudiantil, las condiciones laborales de trabajadores docentes y administrativos y por profudizar los convenios con empresas.
No obstante, lo que concentra las declaraciones de ambos en el último período refiere al escenario electoral ddel 2018 y a las universidades como espacios de discusión política y “disputa” de las distintas fuerzas políticas que quieren calar hondo en la juventud.
No sorprende entonces que otro de los asistentes al evento de la fundación, Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la UNAM, encargado de suprimir la huelga estudiantil de 1990-2000 introduciendo al ejército a la Universidad, mencionara su apoyo a la política de coaliciones para construir un gobierno que tenga “posibilidades de llevar a cabo sus proyectos”, y supere el “margen de maniobra estrecho”.
Lo desafortunado de la situación, según el ex rector, radica en que se “esté haciendo muy poco en la elaboración de un proyecto de nación”.
Y es que aunque Cárdenas afirme que Por México Hoy no es un movimiento electoral sino “un nuevo proyecto de cambio”, el momento en el que estos personajes se posicionan en torno a las posibilidades que se abren hacia el 2018 es crucial y expresa la disposición de las autoridades universitarias a colaborar con el régimen político para mantener la estabilidad hacia el próximo año y evitar, a toda costa, una nueva oleada del movimiento estudiantil en la zona metropolitana.
Desde la Agrupación Juventil Anticapitalista consideramos imprescindible que los estudiantes, trabajadores y académicos que quieran defender el carácter público y gratuito de la educación básica, media superior y superior, así como garantizar el ingreso irrestricto, mejores condiciones laborales y universidades críticas al servicio del pueblo pobre y trabajador, deben luchar por estas demandas con independencia política de las autoridades universitarias y de las fuerzas del régimen político que se revuelven hacia las elecciones presidenciales.
Sólo con la movilización combativa de estudiantes y trabajadores y desde una perspectiva anticapitalista y revolucionaria -que rompa con los gobiernos que responden a los intereses de los empresarios para que sobre las ruinas de este régimen ponga en pie un gobierno obrero y popular-, podremos avanzar con medidas como impuestos progresivos a las grandes fortunas, cancelación del pago de la deuda externa y renacionalización de la industria estratégica para financiar así la educación y garantizar el acceso irrestricto a ésta.
