Pozos de extracción usados para consumo de agua potable de habitantes de Tláhuac, Xochimilco e Iztapalapa quedaron contaminados después del terremoto del 19 de septiembre de 2017, reveló un estudio realizado por el Instituto de Ecología de la UNAM.
Axomalli Villanueva @1quiahuitl
Miércoles 20 de marzo de 2019
El estudio sobre el estado actual de mantos acuíferos, la explotación de pozos, el abasto real y la demanda actual y potencial del líquido en la Ciudad de México - elaborado por el Instituto de Ecología de la UNAM (IE)- reveló que entre los contaminantes se encontraron coliformes fecales y nitrógeno amoniacal, el cual es un indicador de polución causada por desechos humanos y animales.
Durante los días posteriores al sismo, hubo algunas zonas aledañas a los 41 pozos analizados de muestra que se quedaron sin agua, principalmente de Iztapalapa, Xochimilco y Tláhuac. Sin embargo, de parte del gobierno capitalino encabezado por el entonces jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera no se reportó contaminación de pozos, que surten de agua al 67% de la capital.
El químico Juan Manuel Guerra explicó que la contaminación en los pozos de agua es grave y más aún el hecho de que no se hubiera dicho que el agua estaba contaminada por encima de la norma para consumo humano.
"Esto es muy grave porque quiere decir que se ocultó información necesaria para conservar la salud y a la cual tenemos derecho los habitantes de la ciudad. En aras de no alarmar a la población o no poner en entredicho las políticas públicas de la administración pasada se ocultaron este tipo de datos", denunció.
De acuerdo con el estudio del IE, concluido en octubre del año pasado, las áreas de la Ciudad de México que presentan mayor vulnerabilidad en relación con la claridad del agua son las alcaldías de Iztapalapa, Tláhuac, Xochimilco, Coyoacán y en menor grado Milpa Alta y Azcapotzalco.
Según la investigación, se detectó la presencia de coliformes fecales en 5 de los 41 pozos de la muestra, el equivalente a 12% de los pozos analizados. También se detectaron bacterias Escherichia coli y enterococos fecales en 3 de los 41 pozos, lo que equivale al 7% de la muestra de agua subterránea analizada.
A su vez, en los pozos Tecómitl 21, en Tláhuac, y Santa Cruz Meyehualco en Iztapalapa -que se cuentan entre los más contaminados- se hallaron los tres tipos de elementos contaminantes: coliformes fecales, Escherichia coli y enterococos fecales, lo que demuestra que estos pozos presentan contaminación fecal.
Durante el último informe de gobierno de la anterior administración, se expuso que los programas de rehabilitación, modernización y mantenimiento de pozos permitieron enfrentar eventos catastróficos como el del terremoto. Sin embargo no se hizo mención en ningún momento de la contaminación de los pozos de agua.
El actual titular del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, Rafael Bernardo Carmona, desconoció la existencia de este estudio y aclaró que no podía proporcionar información acerca de la situación de los pozos de agua de la capital mexicana.
Con información de La Silla Rota