En la nochevieja hubo un ataque violento contra militantes de izquierda en Neukölln. Este tipo de acciones son cada vez más corrientes en este barrio de la capital; pero esta vez la agresión no provino de nazis sino de un grupo maoista.
Lunes 2 de enero de 2017
En la misma noche fue atacado un local de izquierda en Nüremberg por nazis. En tiempos de giro a derecha, debemos denunciar y oponer resistencia ante cualquier acción contra los inmigrantes, las mujeres, LGBT, trabajadores y la izquierda.
Apenas pasada la medianoche, una docena de militantes y amigos de la Organización Internacionalista Revolucionaria (RIO) fueron agredidos por un grupo de hombres integrantes de Resistencia Juvenil (Jugendwiderstand) en una calle lateral cercana a la estación de trenes de Neukölln. Varios integrantes de RIO fueron golpeados en la cara y en el estómago, lo que provocó heridas de sangre en un compañero. Lilly Freytag, militante de RIO, describe la situación:
"Estábamos tirando fuegos artificiales e intercambiando saludos por año nuevo cuando miembros de Jugendwiderstand pasaron por nuestro lado, nos reconocieron e inmediatamente lanzaron dichos sexistas como vaginas trotskas'. Poco después regresaron cerca de diez de ellos, encapuchados y mientras nos golpeaban, exclamaban
este es nuestro barrio, hijos de puta´. Inmediatamente algunos vecinos de esta barriada obrera se acercaron a socorrernos y preguntaron si se trató de un ataque nazi.“
Cada vez son más frecuentes los ataques incendiarios a locales de izquierda, ataques físicos a militantes e inmigrantes o las pintadas racistas en Neukölln y Kreuzberg. Cada vez hay mayor despliegue policial en el barrio, así como desalojos y protestas.
Wladek Flakin, periodista y también miembro de RIO, opina que "ellos se refieren a `su barrio´, aunque hace apenas un par de años se mudaron aquí provenientes de los suburbios acomodados. En lugar de promover la defensa contra los ataques de nazis y la represión policial, Jugendwiderstand es enemiga evidente de activistas de izquierda. Hay poco para diferenciarlos de los ataques de la extrema derecha“.
La Organización Internacionalista Revolucionaria condena contundentemente este ataque y convoca a todas las organizaciones sindicales y de izquierda, a las asociaciones barriales y a vecinos y activistas a solidarizarnos y distanciarnos de Jugendwiderstand. "En tiempos de creciente violencia del Estado y la derecha, los grupos, cuya política reside en atacar físicamente a otras organizaciones de izquierda, no pueden ser considerados como comunistas o izquierda“, afirmó Flakin.