La empresa canceló ayer el 55 % de sus vuelos debido a la huelga de pilotos más grande en la compañía desde 1998.
Sábado 20 de septiembre de 2014
Fotografía: Reuters
Los tres sindicatos convocantes al paro, que podría extenderse hasta más allá del 22 de septiembre, denuncian la creación de una empresa llamaba Transavia, que trabaja con la modalidad de "bajo costo", lo cual implicaría reducciones salariales y la degradación de las condiciones de trabajo.
Philippe Alcoy, corresponsal de La Izquierda Diario desde París, el pasado miércoles escribió al respecto: "Las negociaciones se encuentran en un impasse y la perspectiva de una huelga dura parecería confirmarse. Sin embargo, si los sindicatos no ofrecen una perspectiva que rompa con cierto corporativismo, que cuestione el concepto mismo de “low cost”, defendiendo al mismo tiempo precios de pasajes accesibles a las clases populares y ligándose a trabajadores de otras compañías, es probable que la huelga pierda fuerza con el correr de los días".
Por su parte, la aerolínea mediante un comunicado de prensa declaró que "cuenta con que la tasa de participación de pilotos no supere el 60 %", sin embargo aconsejó a los pasajeros que hayan reservado un vuelo hasta el día 22 de septiembre que posterguen el desplazamiento o cambien el boleto.
Según declaraciones de la empresa para la Agencia Reuters, cada día de paro les genera pérdidas de entre 10 y 15 millones de euros.
Hasta el momento las negociaciones continúan bloqueadas. La empresa propuso cambios insignificantes a su plan estratégico, los cuales fueron rechazados por los pilotos. Sin embargo, la patronal parece apostar al desgaste con el pasar de los días. Ante esto los sindicatos tomarán una decisión en cuanto a la continuidad de la huelga el día sábado. Lo más probable es que ésta continúe y se prolongue más allá del 22 de septiembre.
