El cuestionado funcionario se presentó en la Cámara de Diputados, donde vivió incómodos momentos para explicar la situación laboral en Argentina, en el marco de un fuerte ajuste que se descarga sobre las grandes mayorías. La izquierda le salió al cruce.
Jueves 6 de octubre de 2022 10:16
Este miércoles, con la presencia del ministro Claudio Moroni, continuó en la Cámara de Diputados el debate sobre el presupuesto 2023.
La presencia del funcionario se dio en un marco polémico, tras la resolución del conflicto del neumático que lo dejó en el ojo de la tormenta, cuestionado no solo por los trabajadores sino también por parte de referentes del oficialismo que están buscando reubicarse de forma crítica para dialogar con un descontento social creciente, en un marco de altísima inflación.
Fue en ese contexto que el ministro no tuvo mejor idea este miércoles que admitir que "es difícil recuperar los salarios cuando la inflación es tan alta”, aunque de forma insólita también afirmó que "Argentina fue uno de los países que menos salario perdió en la región y en el mundo".
Sus palabras, por supuesto, no se condicen con la realidad que viven millones que día a día ven deteriorarse sus ingresos. Pero tampoco con las estadísticas: según un análisis realizado por el Observatorio del Derecho Social de la CTA, el salario real de los trabajadores registrados cayó un 3,5 % interanual en agosto. A eso hay que agregar que estos datos tienen en cuenta sólo a una porción de los asalariados. Recordemos que según datos del Indec el 60 % del conjunto de los trabajadores percibió menos de $ 70.000 en el segundo trimestre del año, mientras que el 80% de los ganó menos de $ 100.000 en el mismo período. A la situación de los registrados hay que agregarle que entre noviembre de 2019 y julio de 2022 los trabajadores no registrados sufrieron una caída de 13 % en sus ingresos.
Quién no perdió la oportunidad de salir al cruce de tanta mentira fue Nicolás del Caño, quien le preguntó al ministro: “La pobreza crece porque se pulverizaron los salarios, ¿qué van a hacer?”. El referente de la izquierda también agregó: “La evolución de los salarios según el Indec -en relación a octubre del 2015- tuvo una caída de 22 puntos porcentuales en el poder de compra del sector privado registrado; de 28 puntos en el sector público y de 35 puntos porcentuales -comparado a octubre del 2016- en los sectores informales. Y tengamos en cuenta que esto llega hasta julio y no están los datos donde hubo una escalada inflacionaria de estos últimos meses de julio agosto y septiembre.”
Moroni respondió que el Gobierno quiere que "el salario crezca. Estamos con un problema inflacionario severo y quisiéramos recuperar los 20 puntos que se perdieron de salario. La pandemia existió y fue la peor crisis de la humanidad", argumentó el funcionario".
Sin embargo, la realidad es muy distinta. El propio plan acordado por el Frente de Todos con el FMI, y votado también en el Congreso Nacional por la derecha de Juntos por el Cambio, es un plan inflacionario intencionalmente, ya que es la forma acordada para licuar el gasto público, es decir, para avanzar en los recortes fiscales que pide el organismo internacional.
Como mostraron los trabajadores del neumático, no es esperando promesas desde arriba como se van a recuperar los ingresos, sino con los métodos de lucha de la clase trabajadora.
