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Red Internacional
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UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO. Ajustes en la UNAM ¿cómo afectan a la Biblioteca Central?

El pasado 11 de junio el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, informó que la Dirección General de Bibliotecas desaparece y se crea la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información (DGBSDI), que pasará a depender de la Secretaria de Desarrollo Institucional ¿Qué implicaciones tendrá para la comunidad universitaria, trabajadores, académicos y estudiantes?

Miércoles 1ro de julio de 2020

En el Boletín UNAM-DGCS-506 se informa que la Dirección general de Bibliotecas desaparece y se crea la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información (DGBSDI) y pasará a depender de la Secretaria de Desarrollo Institucional.

También crea la coordinación de Universidad Abierta, Innovación Educativa y Educación a Distancia (CUAIEED) que impulsará la creación y aplicación de modelos educativos y metodologías innovadoras en las modalidades de educación presencial, abierta, a distancia y mixtas o semipresenciales. En la Gaceta de la UNAM el jueves 11 de junio del 2020 se publicaron los acuerdos y las funciones de la nueva DGBSDI.

Todo ello se plantea en el marco de la pandemia de COVID-19 y el retorno a la “nueva normalidad” con el argumento de adecuar las estructuras para las condiciones sanitarias de la contingencia mundial.

En lo que respecta a la DGBSDI, el acuerdo dice “la biblioteca tiene que redefinir, expandir y acrecentar sus alcances en términos de acceso a sus acervos y recursos a distancia, para beneficio de todos los usuarios que lo requieran, así como a desarrollar los recursos digitales y los ámbitos virtuales que sean pertinentes”.

Con ello se viene un cambio estructural muy grande en la UNAM tanto en el modelo educativo como en las tecnologías de información y comunicación.

El debate importante de fondo son los planes educativos que plantean modelos “híbridos” y que son respaldados por organismos como la OCDE que se vienen imponiendo a nivel mundial donde la construcción del conocimiento crítico, la situación de desigualdad y precariedad que se vive entre profesores y alumnos, así como la privatización y la elitización de la educación son elementos del debate y que tienen impacto en las bibliotecas como fomentadoras de la educación.

DGB-Biblioteca Central ahora DGBSDI-Biblioteca Central

En el portal de la antes DGB solo estaban integradas 10 funciones. Ahora, con el acuerdo del 11 de junio, la nueva DGBSDI tiene 23 funciones, lo cual refleja un aumento de estas funciones, en general debe estar inmersa y preparada en la industria global de tecnologías de información, en un entorno más digital y virtual.

De todo esto se desprende una amplia discusión y revisión de las nuevas funciones y actividades, que invariablemente impactará en los servicios, espacios, personal, herramientas, e incluso cambios administrativos. Tendremos nuevas funciones acordes a la “nueva normalidad” o nueva realidad. Tenemos que tener presente que se modificarán rutinas de trabajo.

En varias bibliotecas universitarias de Europa ya están modificando procedimientos y rutinas de funcionamiento debido a la pandemia. Están retirando parte de sus libros para proporcionar nuevos espacios de lectura, han innovado sus estructuras, han extendido la conexión a internet, ampliado recursos digitales, incluso están digitalizando sus acervos. Todo ello para que el usuario siga contando con el acceso a la información de una manera verídica y fiable.

En la UNAM se están haciendo planteamientos muy parecidos a las medidas tomadas en Europa. Sin embargo, con la crisis pandémica se revelaron otras pandemias como la desigualdad y precariedad en la que viven miles de universitarios.

Es el hacinamiento, la falta de acceso a equipos y tecnología, el drástico aumento del desempleo que afecta a las familias y los bajos salarios que no cubren las necesidades básicas parte de esta realidad por lo que los cambios y modificaciones en la universidad merecen que pongan en el centro a sus trabajadores, académicos y administrativos en el centro.

Para hablar de una “educación a la altura de las circunstancias”, se requiere también un aumento al presupuesto educativo.

Movimiento de Bibliotecarios del SIBIUNAM

El movimiento de bibliotecarios de la UNAM que viene desarrollándose desde hace algunos años en distintos momentos se ha enfrentado a autoridades que, con el pretexto del avance tecnológico, pretenden golpear en la materia de trabajo de esta categoría. También ha denunciado las malas condiciones de la red de bibliotecas de la UNAM, así como la falta de inventarios y descarte.

Ante estas nuevas condiciones, ahora más que nunca es necesario estar organizados por nuestras demandas, la recuperación de la materia de trabajo y la capacitación que sea acorde al desarrollo de las tecnologías de información y comunicación. Las nuevas tendencias nos obliga a estar listos para esta transformación de información digital y virtual, es importante retomar el Movimiento de bibliotecarios del SIBIUNAM.

Desde la Agrupación Desde las Bases consideramos que tenemos que estar preparados para el regreso de la “nueva normalidad”, con la revisión de un protocolo de regreso que abarque principalmente la seguridad, la salud y condiciones laborales acordes, implementadas y supervisadas por la comisión de seguridad y salud en el trabajo con un funcionamiento desde la base trabajadora, capacitada para salvaguardar la vida en los centros de trabajo, revisar las nuevas dinámicas que se requerirán para realizar la limpieza, los riesgos y condiciones de trabajo.