Este miércoles allanaron el Ministerio del Interior, la productora de Andrea del Boca y la UNSAM por la triangulación de $ 36,6 millones destinados a la producción de novelas.
Jueves 13 de octubre de 2016 20:23
En abril el titular del Sistema Federal de Medios Públicos, Hernán Lombardi, había cancelado todos los contratos expedidos excepto Mamá Coraje, por el avance en la producción, sin embargo no hay noticias sobre su salida al aire. La triangulación se habría realizado a partir de un convenio con la UNSaM en el que se hacía cargo de la administración de los fondos del Ministerio de Planificación que encabezaba la polémica figura de Julio De Vido. El abogado denunciante Ricardo Monner Sans, Presidente de la Asociación Civil Anticorrupción, agregó un informe sobre la supuesta compra de equipamiento audiovisual por 14 millones de dólares desde una ortopedia y cedida a la UNSaM.
En la denuncia figura que: “Los aquí denunciados (…) que son concurrentes como los del Rector de la Unsam, Sr. Carlos Rafael Ruta, si bien la Ley de Universidades (…) le dan autarquía presupuestaria a las mismas pero en el espíritu no dice que se pueden usar para lavar dinero, el Ministro De Vido les manda dinero y particulares sin tener justificado el origen de los gastos se lo distribuyen como si fueran panes para comer.(…). Además el convenio especificaba que la unsam aportaría unos $ 18 millones”.
Ayer, distintas fuentes de la UNSAM nos informaron que desalojaron a todos los trabajadores de la sede de administración por dichos allanamientos y que el rectorado había quedado incomunicado, al no poder realizar llamados afuera.
Al respecto Ezequiel Andrada, presidente del centro de estudiantes de Humanidades dijo: “La gestión utiliza la universidad para sus negociados, mientras aplican el ajuste de macrista cerrando carreras, como la Licenciatura en Organización y dirección Institucional y la licenciatura de análisis ambiental o no pudiendo realizar las prácticas de la carrera de enfermería. Es claro que su rol no es el de la defensa de la educación pública y de calidad, sino un puesto desde dónde poder llevar adelante sus maniobras y negociados. Los medios por su parte, aprovechan esta situación para hacer campaña contra la universidad de la que formamos parte los estudiantes los docentes y los no docentes que muy lejos estamos de avalar estas situaciones”. Y agregó: “los estudiantes no sabemos en qué se invierte, a dónde va el dinero que ingresa de los posgrados y de los cientos de convenios con empresas privadas. Exigimos la apertura de los libros contables. Ademas, la representación estudiantil no tiene injerencia en las decisiones del consejo, ya que somos minoría en ese organismo, ante esta situación creemos que es imprescindible crear una comisión investigadora independiente, con estudiantes docentes y no docentes de la universidad que no tengan nada que rendir a la gestión, y la democratización de los órganos de con gobierno con mayoría estudiantil".
Por su parte, trabajadoras de la UNSAM que forman parte de la Agrupación Marrón declararon: "La Universidad está repleta de convenios de este tipo. Favorecen licitaciones amigas y la precarización laboral. Los trabajadores junto a los docentes y estudiantes defendemos la educación pública, libre y gratuita contra estos actos de corrupción de las autoridades y del gobierno".