Desde el pasado lunes los trabajadores de Amazon en el centro logístico en la Ciudad de Graben se encuentran de nuevo en huelga. Sumándose con ello a las huelgas escalonadas que se vienen estallando en otros centros logísticos de Amazon, como ha sido en Leipzig el 13 y Bad Hersfeld el pasado 17 y 18 de Marzo. Las demandas: mejores condiciones laborales, respeto y sobre todo un contrato colectivo.
Jueves 26 de marzo de 2015
Foto: LID
Es en Bayer al sur de Alemania en la pequeña localidad de Graben donde a partir del lunes los trabajadores de Amazon se encuentran en una huelga de 72 horas. Al igual que sus colegas en los otros 8 centros de Amazon en Alemania, las razones de su lucha son una combinación de demandas “locales” la alta cuota de trabajadores enfermos de larga duración y la demanda nacional por un contrato colectivo.
Los trabajadores organizados en el Sindicato Unido de Servicios (ver.di /Vereinte Dienstleistungsgewerkschaft) arrancaron la huelga denunciando que debido a las condiciones laborales que se viven en el centro, alredor de una cuarta parte de los trabajadores se reportan enfermos de larga duración. Situación que no hay que minimizar sobre todo en una región donde el índice de ausencia laboral por razones de salud es una de las más bajas (4,4%) a nivel nacional.
Pero esto no es solo un problema que se vive en Amazon Graben, sino es un problema derivado de las condiciones laborales que impone una multinacional en cada uno de sus centros, verdaderas fábricas de paquetes. A simple vista el proceso que se realiza en cada centro es simple: recepción de mercancías, su ordenación en los armarios, recepción del pedido, búsqueda y recolección del pedido, preparación y empaque y finalmente envió (ver video). Lo que no se alcanza a ver es su intensidad y el estrés que viven los trabajadores para –presionados por el reloj- enviar los paquetes en el tiempo y forma comprometido. Situación que se vive diariamente y aumenta de forma extrema durante Pascuas y Navidad, las dos temporadas de ventas más importantes de Amazon.
La lucha por un contrato colectivo crece y se politiza
Como hemos venido informando en Izquierda Diario, los trabajadores de Amazon vienen realizando huelgas desde 2013 demandando un contrato colectivo a la patronal. Este contrato colectivo permitiría arrancarle a la multinacional mejores condiciones laborales enfocadas a mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Frente a ello los trabajadores organizados han obtenido una rotunda negativa y no solo eso la patronal ha buscado desacreditarlos de todas las formas posibles, buscando dividir y confrontar a los trabajadores entre sí.
Sin embargo, lo que ha conseguido la patronal es que los trabajadores organizados se politicen, crezcan en número y que una lucha que inicio en solo dos centros logísticos Leipzig y Bad Hersfeld, hoy se ha extendido a los 9 centros con que cuenta Amazon en Alemania. En 7 de ellos ya han estallado huelgas y el grado de organización sindical entre una población de cerca de 10 mil trabajadores se va acercando al 50%.
Desde luego, tampoco ha sido fácil para la longeva burocracia del ver.di, donde aún sigue dominando la socialdemocracia, que se han visto más de una vez desbordados por la lucha, sobre todo por la disposición de los trabajadores a radicalizar las acciones en contra de la multinacional.
Al mismo tiempo, el grado de coordinación entre centros aumenta a pesar de los límites que busca imponer la burocracia sindical, pero que en medida de que se ha alargado la lucha el proceso de politización de muchos de los trabajadores activos hace cada vez más presión desde las bases a la dirección del sindicato, así, se ha logra un tercer encuentro nacional de trabajadores de Amazon y hay avances en una coordinación europea, sobre todo con Francia, Polonia y en otro nivel con EEUU.
Al ser Amazon un ejemplo de lucha constante en contra del trabajo precarizado en la poderosa Alemania, -situación que se buscaba ignorar- se ha vuelto un referente de lucha. Hoy hay cada vez más discusiones sobre el actual mercado laboral alemán, los efectos de las reformas neoliberales implementadas desde los gobiernos de Helmut Kohl, profundizados con la anexión de la Alemania oriental (los primeros “afortunados” de estas reformas) y la famosa Agenda 2010 de los socialdemócratas.
Estamos a unos días de que inicie la semana de Pascuas, los trabajadores de Amazon con las huelgas que han realizado en los últimos días empiezan a calentar motores para lanzar nuevas acciones que le logren arrancar a la multinacional respeto y con ello imponerle sus demandas.
