Sábado 15 de noviembre de 2014
La canción de los Charros que se escuchó en la Federación de Box bien pudo ser el título de la convocatoria de este jueves de Seamos Libres. Esta joven agrupación del legislador porteño Pablo Ferreyra, hermano de Mariano, el militante del PO asesinado por las patotas de Pedraza, se encuentra hoy en el incómodo lugar de intentar apoyar desde el progresismo al gobierno nacional en momentos en que es la propia Presidenta la que está proponiendo un giro a la derecha. El acto sirvió también como apoyo a la precandidatura presidencial de Jorge Taiana, quien abrió el acto con críticas a Scioli y a Berni. Estuvieron presentes dirigentes del Evita y de Patria Grande y cerraron la jornada el propio Ferreyra y Jonathan Thea, de La Gleyzer.
El prolijo acto contó con la participación de Los Charros que entretuvieron a los asistentes hasta que cerca de las 20 comenzaron a entrar los principales referentes de Seamos Libres y los invitados de un acto que tuvo más clima de izquierda independiente que de liturgia peronista. Dieron el presente el diputado nacional del Evita, Leonardo Grosso, los legisladores porteños María Rachid, Gabriel Fuks, el decano de la Facultad de Ciencias Sociales Glen Postolski , miembros de la CTA como Marcelo “Nono” Frondizi y Martín Ogando y otros referentes de la recién fundada Patria Grande.
Lo que dejó en evidencia el acto fue la desubicación y la soledad de esta nueva agrupación con respecto al resto de las organizaciones kirchneristas, que ya están barrenando la ola naranja. Sin ir más lejos y más allá de la presencia de dirigentes del Movimiento Evita en un acto que tuvo críticas al gobernador de la Provincia, esta agrupación tiene su propio juego y mantiene una relación con el propio Scioli por intermedio de otros dirigentes como Emilio Pérsico o el Chino Navarro.
El acto mostró una organización con presencia juvenil y trabajo barrial en la Ciudad, pero con casi nulo desarrollo en las estructuras sindicales y estudiantiles, donde tiene mucho peso la izquierda y el PJ. Políticamente, este espacio de jóvenes kirchneristas se encuentra bastante aislado entre sus “compañeros” K, que ya están pintándose la cara de naranja. Por eso también sonaron raros los cuestionamientos de Taiana al racismo y la represión de la protesta social en la figura de Berni cuando hace tiempo es la propia presidenta la que pide orden desde su atril cada vez que puede y lanzó un xenófobo Código Penal. Un ejemplo similar se dio con el derecho al aborto que reivindicaron Ferreyra y Thea, sólo una semana después de que Cristina ordenara dejar sin quórum la comisión que debía tratarlo en el Congreso Nacional.
Como verdaderos surfistas sin olas, intentaron denunciar todos los elementos de derecha que el gobierno viene llevando a cabo, mientras reivindicaban su apoyo. Una verdadera contradicción en sí misma. Como escribió el diputado del PTS-FIT, Nicolás Del Caño, en su carta, ¿Hasta cuándo vas a bancar esta represión del gobierno?, refiriéndose a los ataques que sufren los trabajadores de Lear: “Esto es parte del nuevo consenso de derecha que une a Cristina, Berni, Scioli, Massa y Macri en cómo responder a los reclamos legítimos como el de “familias en la calle, nunca más” y agregaba “los que defienden al gobierno, en cambio, no pueden mirar a los trabajadores a los ojos sin que se les caiga la cara de vergüenza”.
En ese marco, el “luchar para profundizar y para ganarle en el 2015 a Macri, Massa y para que no nos vendan gato por liebre” que lanzó Taiana no pareció muy creíble ya lanzado el plan de casi todo el kirchnerismo a sumarse a la ola naranja para 2015 y a que durante los últimos 7 años el FPV porteño no sólo no fue oposición sino que se dedicó a garantizarle la gobernabilidad a Macri por algún que otro intercambio de favores.
Pablo Ferreyra es parte del interbloque kirchnerista en la Legislatura porteña donde ingresó en 2013 como parte de un acuerdo con el Cuervo Larroque actuando casi como una colectora de la boleta de Daniel Filmus.
