En días pasados se confirmó que existía una denuncia por robo de hidrocarburos contra Carlos Romero Deschamps, conocido dirigente charro del sindicato de petroleros y a quien históricamente se le liga con persecución y asesinatos de trabajadores opositores a su gestión.
Miércoles 6 de febrero de 2019
La juez decimosegundo en Materia Administrativa de la Ciudad de México, fue la que otorgó a la dirección sindical del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) el amparo que los exime de la entrega de los convenios firmados desde 2013.
También impide que se exijan las copias de nómina del dirigente petrolero, el argumento es que los daños serían irreversibles contra la imagen del sindicato, aunque el argumento pareciera que sería más bien el daño a la imagen de los dirigentes charros la que sería irreversiblemente dañada.
Sin embargo, esta tarde, apenas un día después de que el amparo fuese aprobado, trabajadores de PEMEX le denunciaron ante la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) por enriquecimiento ilícito, defraudación y despojo.
La denuncia incluye a los 36 secretarios seccionales del STPRM, así como familiares y prestanombres, donde aseguran que el monto asciende a 150 millones de dolares. Y entre las propiedades despojadas van 26 fábricas. 126 tiendas y 60 mil hectáreas de ganado, así como vende de plazas por varios miles de pesos.
La realidad de la base trabajadora de Pemex sigue siendo preocupante, pues ni la oposición sindical ligada al nuevo gobierno ni la antaña corriente priista que controla el sindicato tiene como prioridad a los trabajadores sino, a sus intereses de coyuntura política.
Solo renacionalizar todo lo que ya a sido vendido de Petróleos Mexicanos, la eliminación de la burocracia sindical matona que dirige Deschamps, así como poner bajo el control de sus trabajadores toda la paraestatal puede rescatarla en beneficio de las mayorías.