Durante el pleno universitario desarrollado este pasado sábado, tuvo como punto central la adhesión a la convocatoria del llamado desde CONFECh, en el marco de la demanda por el aumento en la beca BAES. Desde abril que no llamaban a movilización, lo que trae consigo pasividad y desarticulación en la organización estudiantil. La educación atraviesa una enorme crisis ¡Retomemos la lucha por la educación gratuita y la organización estudiantil!
Martes 7 de septiembre de 2021
El llamado a movilización desde la CONFECh para este 10 de septiembre se da en el marco del aumento del monto en la tarjeta BAES, beneficio que para miles de estudiantes es necesario pero completamente insuficiente. Durante el pleno estudiantil UTA se resolvió llevar a votación por carreras para adherir a esta movilización y resolver en particular su forma de manifestarse.
Durante la jornada el debate también giró en torno a la presencialidad y sobre la falta de garantías para estudiantes y funcionaries. El autoritarismo queda en evidencia en que el mismo lunes, en su primer día de “retorno seguro”, las y los trabajadores han debido volver a sus labores sin siquiera tener medidas mínimas de seguridad contra el contagio, sin instalaciones de higiene o de colación, teniendo que recurrir a sus propios recursos para costear sus EPP y enfrentar las condiciones indignas de trabajo a las que las autoridades les empujan a vivir.
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Ha sido un debate constante lo difícil que se vuelve estudiar y trabajar con una educación de mercado en medio de la pandemia. El retorno a la presencialidad sin la opinión y voto de trabajadores y estudiantes es sumamente arbitrario y unilateral, las autoridades firman y deciden desde sus cómodas oficinas, como el rector Emilio Rodríguez que a diferencia de quienes mueven la maquina universitaria, el rector recibe un jugoso sueldo sobre los 7 millones mensuales.
La CONFECh llama a una movilización necesaria pero completamente insuficiente, sobre todo cuando su estrategia de diálogo con el gobierno y de pasividad estudiantil, ha permitido por meses el desfinanciamiento y la paulatina crisis que los empresarios de la educación y el Gobierno cargan sobre les estudiantes y trabajadores.
Es necesario retomar la lucha por la educación gratuita y el fin de la educación de mercado, conjunto a esto el aumento de becas como la BAES es necesario en cuanto se avance con una perspectiva mayor a retomar la demanda histórica del movimiento estudiantil, en que incluso la situación de este beneficio sea discutida abiertamente en asambleas, con delegados revocables y plenarios universitarios.
A 10 años de la movilización estudiantil más grande desde la dictadura, las lecciones y resultados requieren de un análisis crítico: Ni la beca BAES ni la beca “Gratuidad” son las demandas que pelearon miles de jóvenes que exigían una educación gratuita, laica y no sexista, el fin de la educación neoliberal y de mercado. En aquel entonces fueron las direcciones estudiantiles del Frente Amplio y el Partido Comunista quienes rebajaron la demanda por la gratuidad universal conciliando con los intereses del gobierno.
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Son cerca de 70 mil estudiantes a nivel nacional quienes perdieron el beneficio de la “Gratuidad”, casi un 8,7% de los estudiantes provenientes en su mayoría desde colegios públicos y subvencionados. En la UTA, la deserción académica durante el 2020 representó un 11% de estudiantes, y hoy son más de 4.500 estudiantes quienes han perdido la Gratuidad por tener 0% de saldo, o quienes alcanzaron los años de estudio correspondientes sin contabilizar que en pandemia un gran sector de estudiantes no pudiese siquiera matricularse.
Son diversas universidades y direcciones estudiantiles influenciadas por corrientes reformistas como el Frente Amplio o la JJCC, quienes han jugado un rol conciliador y pasivo derivando a la desarticulación de les estudiantes. Con este escenario, y una educación en crisis, se vuelve una urgente organizar activamente la pelea por la educación gratuita y todas las demandas históricas del movimiento estudiantil en la UTA. ¡Activa tu carrera en asambleas! ¡Exijamos un Confech con mandatados revocables que convoque a organizarnos y elaborar un plan de lucha por la rearticulación del movimiento estudiantil!
