La actriz que vuelve a las carteleras con la película de terror “Halloween: el final”, señaló que “lo que da miedo es la vuelta del fascismo y el odio en las redes sociales".
Jaime Castán @JaimeCastanCRT
Miércoles 12 de octubre de 2022 06:53
Jamie Lee Curtis, actriz de cine y televisión, productora de cine y escritora estadounidense, está presentando “Halloween: El final”, la última de las películas de la saga de terror iniciada por John Carpenter en 1978. Con ese motivo ha recalado en el Estado español y ha concedido entrevistas, una de ellas a la Cadena Ser.
Su actuación en “Halloween” en 1978 fue muy destacada en el género de terror, un cine que la actriz reconoce que no disfruta: "no me gustan las películas de miedo. Nada. Nada me gusta de ellas. Creo que si se me da bien actuar en ellas es porque mi reacción es buena, no lo entreno, pero reacciono a esas cosas, soy muy emocional y muy sensible".
En la entrevista, la actriz ha destacado sin embargo, que “lo que da miedo es la vuelta del fascismo y el odio en las redes sociales". Aprovechó los micrófonos para hablar menos de cine y más de la situación política y social actual:
"Tengo una hija trans. Hay amenazas contra su vida, sólo por existir como ser humano. Hay gente que quiere aniquilarla, a ella y a gente como ella. El nivel de odio es..., como si no hubiéramos aprendido del fascismo, como si no hubiéramos aprendido cuál es el resultado de eso. El exterminio de seres humanos. Eso es aterrador. Así que Jamie Lee Curtis está asustada, y tú también deberías estarlo. Y Jamie Lee Curtis tiene una voz, y está tratando de usarla, y tú también deberías. Y así es cómo cambiamos las cosas, pensando en ellas, aprendiendo, y luego usando nuestras voces para llamar la atención y luchar contra ellas".
🏳️⚧️ Esto es importantísimo...
"Jamie Lee Curtis está asustada y tú también deberías estarlo"
La actriz habla de su hija trans y el miedo por los discursos de odio
🔗 Entrevista completa https://t.co/vRyT4DhMyv pic.twitter.com/gccQYNBq4T
— El cine en la SER (@ElCineEnLaSER) October 11, 2022
En el propio Estado español los casos de delitos de odio hacia la comunidad LGTB+ han aumentado un 67% con respecto a los dos años anteriores que se han hecho censos sobre estos casos. 446 delitos de odio hacia la comunidad de manera oficial, siendo más si tenemos en cuenta los casos que no llegan a denunciarse y que se calculan en un 90% del total.
Te puede interesar: https://www.izquierdadiario.es/Aumentan-un-67-los-delitos-de-odio-por-LGBTIfobia-registrados-Si-tocan-a-une-tocan-a-todes
Te puede interesar: https://www.izquierdadiario.es/Aumentan-un-67-los-delitos-de-odio-por-LGBTIfobia-registrados-Si-tocan-a-une-tocan-a-todes
La actriz estadounidense señaló además en relación a la película cómo la tecnología y las redes sociales se instrumentalizan para promover la violencia y el odio: “de alguna manera, creo que el verdadero monstruo es esta habilidad tecnológica que ahora mismo tenemos para promover violencia y odio hacia los otros, que es lo que hacemos diariamente en redes sociales y lo trasladamos a nuestras vidas”. Algo que para ella “da miedo especialmente en esta época donde está resurgiendo el fascismo, particularmente en Italia, o con lo que está pasando en Irán, donde los derechos de las mujeres están puestos en duda. Es un tiempo que da miedo".
Te puede interesar: ¿Y qué hacemos contra la extrema derecha?
Te puede interesar: ¿Y qué hacemos contra la extrema derecha?
"De lo que habla esta nueva película es de que todos somos monstruos” decía la actriz en la entrevista. Si bien, en la violencia y los discursos de odio, hay que distinguir claramente quiénes agreden. La LGTBIfobia y el auge de la extrema derecha son parte de una ofensiva contrarrevolucionaria que está promovida y financiada por clases sociales con intereses muy concretos. Son sectores de la burguesía las que apoyan y dan voz desde sus grandes aparatos mediáticos a partidos y organizaciones de ultraderecha, apostando por una salida reaccionaria a esta época de crisis y guerras del capitalismo para garantizar sus privilegios.
Del mismo modo, las redes sociales pueden ser en parte un problema, más si cabe cuando están controladas por multinacionales. Pero sin perder de vista que son los grandes medios tradicionales, prensa, radio y televisión, consolidados por décadas, los que orientan en función de sus intereses y de manera determinante la opinión pública y los discursos que se expresan cotidianamente en las redes.
Como dijo el revolucionario Antonio Gramsci, en su conocida frase: “el viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. Y en ese claroscuro surgen los monstruos”. Es un tiempo de monstruos y de miedo, pero que no nos puede paralizar, sino al que hay que oponerle la lucha colectiva y la pelea por otro mundo, sin clases, sin explotación ni opresión.