Durante los últimos años Chile ha sido afectado por una crisis hídrica que hoy en día tiene a la región de Valparaíso casi sin agua.
Miércoles 13 de octubre de 2021
Durante los últimos años Chile ha sido afectado por una crisis hídrica que hoy en día tiene a la región de Valparaíso casi sin agua. El informe “Sequía en Chile: la brecha más profunda” construido sobre la base de la publicación de Escenarios Hídricos 2030 “Radiografía del Agua: Brecha y Riesgo Hídrico en Chile”, afirma que el porcentaje promedio de vulnerabilidad en zonas carentes de agua potable en Chile es mayor al 80%. En el caso de Valparaíso, de las 38 comunas de la región, 11 presentan Alta Brecha Hídrica.
Las principales fuentes acuíferas están reducidas a su mínima expresión, cada año más afectadas por la sequía: “Todos tenemos que ser conscientes de que tenemos que cuidar el agua. No nos sobra, sino que nos falta”, indica José Luis Murillo, gerente general de Esval.
Lago Peñuelas: la falta de lluvias
El Lago Peñuelas era la principal fuente de agua potable para Valparaíso, pero hoy no cubre las necesidades mínimas de los habitantes del sector. El principal problema es la dependencia de las lluvias, las que durante los últimos años se han vuelto cada vez más escasas. El invierno pasado precipitó un poco más, lo que muchas veces genera una falsa seguridad respecto del recurso hídrico. “En Chile todas las ciudades abren la llave y tienen agua potable, sin ningún problema para la salud. Pero eso nos da una falsa sensación de seguridad, de que hay agua constantemente. Eso es absolutamente falso”, asegura Murillo.
La escasez hídrica en las napas de agua dulce ha hecho poner los ojos en el mar: “El futuro es consumir el agua que nos hace falta y mantener las fuentes que tenemos. Si no, nos encontraremos con un problema de escasez que nos llevará a desalar agua, inevitablemente”, agrega Murillo.
“Es una opción real que se puede mantener en el tiempo. Ya se está implementando en el norte de Chile y en otros países. Necesitamos inyectar agua al acuífero y qué mejor que hacerlo de manera inversa, que de la costa venga a la cordillera”, comenta el jefe comunal.
Ya hay 24 costas desaladoras en Chile, pero la mayoría son utilizadas por la gran minería en el norte. La chance de que se utilice también para el consumo domiciliario para ser la única alternativa.
Una nueva modificación en la distribución hídrica contra el pueblo trabajador
El agua se la quedan las grandes empresas, y se apoyan en la constitución herencia de la dictadura para hacerlo. Esta situación a sido ampliamente denunciada.
En los últimos días, una nueva noticia puso en alerta a la población de la quinta región. El ministerio de obras públicas busca disminuir la distribución de agua hacia las comunas del interior de la región de Valparaíso, en los hechos, descargar la crisis hídrica sobre los hombros del pueblo trabajador.
Con esto el abastecimiento para consumo humano no estaría asegurado para los próximos meses, porque no se sabe con certeza si las reservas aguantarían hasta que el deshielo que permite tener mas agua al embalse Los Aromos, que se abastece del Rio Aconcagua, cutas dos primeras secciones lograron revertir el decreto que efectuaba a la zona y la agricultura.
Alejandro Salas, el generante general de Esval menciona que “Esval tiene derechos legalmente constituidos en el rio, como el resto de usuarios, pero el agua no ha llegado a la cuarta sección en las últimas semanas como se previó en la mesa del Aconcagua” .
Frente a esta situación los alcaldes han exigido que se posponga este decreto y se espere el deshielo. El gobernador Rodrigo Mundaca critico que se enteró por la prensa de este cambio, pero también llamo a que este se posponga.
Antonio Páez, trabajador y candidato a diputado por el distrito 7 por el Frente por la unidad de la clase trabajadora que compone el partido de trabajadores revolucionarios menciono “El gobierno y los empresarios quieren que los pequeños agricultores y el pueblo trabajador pague la crisis hídrica.”
Además “El frente amplio y la ex concertación no han hablado de otra cosa que no sea más regulación a empresas privadas. Pero no basta solo con regular a estas empresas. Para enfrentar la crisis hídrica es urgente un plan de emergencia ambiental financiado por impuesto a las grandes fortunas, la expropiación bajo control de trabajadores y comunidades de las empresas responsables de la distribución de agua y la planificación democrática de la producción de la región que no esté al servicio del saqueo que han generado ciertas empresas sobre la población de la quinta región, si no realmente a nuestras necesidades.“