Jesús Tomillero hizo pública su homosexualidad. Cansado de ser humillado quiere dejar el arbitraje de fútbol después de 10 años. Tomó la decisión después de recibir los insultos de un hincha de la segunda división andaluza juvenil, junto a la burla del resto de los hinchas.
Pablo Maltz @pablomaltz
Sábado 14 de mayo de 2016
Foto: cuenta oficial de Twitter de Tomillero @Jesustomille
No es la primera vez que sufre estas agresiones, que siempre terminan con una sanción económica al agresor, esta vez multaron con 150 euros a un hincha. El árbitro, quien dirige desde hace 10 años, se siente doblemente humillado por este tipo de sanciones que aplicó el Comité de Competición de Cádiz.
Para Tomillero, el arbitraje es parte de su vida: a tal punto llega su fanatismo por la actividad que se tatuó dos tarjetas y un silbato. Desde el mundo futbolístico llegaron escasas muestras de solidaridad, entre las pocas se puede destacar la del arquero Iker Casillas -campeón del mundo con la selección española- que desde su cuenta oficial de Twitter le expresó: “@Jesustomille un fuerte abrazo y mucho ánimo! El mundo del fútbol respeta más de lo que la gente se piensa! Borregos hay en todos los sitios”.
@Jesustomille un fuerte abrazo y mucho ánimo! El mundo del fútbol respeta más de lo que la gente se piensa! Borregos hay en todos los sitios
— Iker Casillas (@CasillasWorld) 13 de mayo de 2016
Sin bien el fenómeno de las hinchadas argentinas es muy distinto al de las aficiones españolas, se percibe la homofobia como parte de las prácticas legitimadas en ambas escenas deportivas. El antropólogo e investigador José Garriga Zucal afirma sobre las hinchadas argentinas: “en las representaciones de la hinchada se constituye un modelo binario. “Macho” es el que afronta “el combate”, yendo “al frente”, el que se la aguanta. Por el contrario, “puto” es el que huye del campo de batalla rechazando el enfrentamiento cuerpo a cuerpo, el que teme el “mano a mano”, el que no tiene aguante.” El autor refiere a un modelo donde la heteronormatividad hegemónica sólo acepta el binarismo varón-mujer, excluyendo otras identidades de género.
Al cierre de esta edición, Jesús Tomillero anunció que el próximo sábado participará de un encuentro en el marco de la campaña #RojaDirectaHomofobia.
Transformar las conductas no puede ser sólo responsabilidad de los actores que conforman el ámbito futbolístico, pero aplicar sanciones económicas a utileros, hinchas y entrenadores carece de sentido porque en este caso, las sanciones punitivas son estériles. La decisión – esperamos provisoria – de abandonar su profesión, no puede pasar desapercibida y su visibilización resulta necesaria.
