Minutos antes del comienzo de la asamblea la Azul y Blanca (PCR- CCC) presentó un documento diferenciado de la Multicolor.
Viernes 23 de noviembre de 2018 18:16
El miércoles se desarrolló la asamblea de Memoria y Balance de Suteba Quilmes. Minutos antes del comienzo de la asamblea la Azul y Blanca (PCR- CCC) presentó un documento diferenciado de la Multicolor.
En consonancia con su agrupamiento con los “cayetanos”, rompieron con la política de la Multicolor porque no quieren denunciar la complicidad del PJ con el ajuste ni al kirchnerismo.
Este miércoles 21 se llevó adelante en todas las seccionales de Suteba la asamblea ordinaria de memoria, balance y política gremial.
En Quilmes arrancó con la moción de Graciela Monje, secretaria de salud de la seccional, miembro de la agrupación Marrón (PTS+Independientes) para solidarizarse con la lucha ejemplar que vienen dando las compañeras y compañeros de Siam. Se votó por unanimidad la solidaridad y en las escuelas juntar alimentos y dinero a través de los bonos solidarios que sacaron los despedidos.
Seguidamente comenzaron los posicionamientos sobre memoria y política gremial.
Los dirigentes de la Celeste, agrupación que conduce el Suteba Central, junto con la Violeta y la Granate reivindicaron todo lo actuado por la conducción central durante el año y propusieron preparar un gran no inicio para el 2019, toda una confesión de su parte de que dan este año por finalizado, como si el ajuste a los trabajadores de la educación pudiese seguir esperando.
Este posicionamiento fue fundamentado en todas las intervenciones haciendo alusión a las elecciones del próximo año, planteando que hay que juntarse para ganarle a Macri y reivindicaban las palabras de Cristina Fernández de Kirchner en cuanto a que los trabajadores que más ganan tienen que darle a los que menos cobran (“impuesto al salario”, implementado bajo su gobierno). Según estas agrupaciones el triunfo de Cristina - quien dice que la división entre izquierda y derecha es cosa del pasado y que no debemos enojarnos con la iglesia por su activa campaña contra el derecho al aborto seguro, legal y gratuito – es la salida a la crisis.
Desde la Marrón nos preguntamos cómo va a hacer para que no sean los trabajadores y el pueblo pobre quienes la paguen, si no plantea un programa que comience con el no pago de la deuda externa.
Frente a esto, desde la Marrón, además denunciamos que la política gremial que llevó adelante la conducción provincial fue el de medidas aisladas, no discutidas en asambleas, por fuera de la comunidad educativa y por fuera de la unidad con el conjunto de los trabajadores. Todo lo contrario a lo que hoy necesitamos para enfrentar la política de Macri, los gobernadores y el FMI.
En cada reunión de delegados, dado que no llamaron a asambleas, nuestra propuesta fue coordinar la lucha de todos los trabajadores que estaban enfrentado el ajuste, sosteniendo que se le puede torcer el brazo al gobierno y no resignarnos a esperar pasivamente que “haya un 2019”.
La Celeste sólo propone la candidatura de Cristina, que en pos de la unidad, puede tener un Michel Temer a su lado para aplicar, como nos demostró en el 2014, un ajuste similar al que aplica este gobierno.
Desde la Marrón reivindicamos la unidad de acción para luchar: el camino que trazan las trabajadoras y los trabajadores de Siam, la heroica lucha del Astillero Río Santiago, la lucha de las mujeres orgullosas con sus pañuelos verdes, que están enojadas con la iglesia y decimos que con la fuerza de los trabajadores, las mujeres y la juventud vamos a desbordar a las centrales sindicales. Esa unidad para golpear juntos contra el ajuste de Macri, pero marchando políticamente separados porque sabemos que el kirchnerismo lo que busca es un gobierno con el PJ para administrar el ajuste ya hecho por el actual.
¿La Azul y Blanca (PCR-CCC) en la Multicolor o con la Celeste?
Sin embargo, el punto de con quien tenemos que unirnos para enfrentar el ajuste nos llevó también a polemizar con la agrupación Azul y Blanca, que integra la Multicolor desde el año 2013, pero que se negó a denunciar en la política gremial a los “dadores de gobernabilidad”, estos son el PJ, que le votó todas las leyes a este gobierno y la CGT, que dejó correr toda la política de ajuste durante estos tres años.
La AyB tampoco critica a ninguna de las variantes de la CTA, que han realizado algunas medidas aisladas este año pero toralmente testimoniales negándose a profundizarlas, como se vio el 14 de noviembre, que no llamaron a paro y movilización, cuando el senado votaba el presupuesto de Macri y del FMI.
Esta polémica con el PCR no es nueva. Luego de unos meses de gobierno macrista la AyB comenzó a sostener que la Celeste “estaba peleando”, emprendiendo así su acercamiento al central y su diferenciación con la Multicolor. Pero para esta asamblea han llegado al colmo.
Se acordó en el marco de la Multicolor un documento, por cierto bastante lavado a nuestro entender con respecto a no denunciar al PJ, al kirchnerismo y a la burocracia sindical, pero que en pos de la unidad acordamos en votar críticamente desde la Marrón. Esta agrupación rompe en las asambleas lo acordado y propone y vota una política gremial propia.
Esta política gremial, planteada sorpresivamente en la asamblea, no se dió solo en Quilmes, sino en Ensenada, Berazategui, Florencio Varela, distritos en los que la Azul y Blanca, propuso una política gremial para el 2019, más cerca del PJ ( y de la Celeste) que de la Multicolor.
Existieron en el Suteba Quilmes durante todo el año discusiones en torno a que, según la perspectiva de la Azul y Blanca, no se podía cuestionar ni exigir a ninguna dirección sindical bajo el argumento de que " cuestionar a las direcciones sindicales, al PJ, o la oposición patronal era " romper la unidad contra el enemigo principal que es Macri".
Además de los debates en relación a impulsar la más amplia democracia en la organización, cuestión a la que se vienen negando y retrocediendo de los acuerdos alcanzados para esto otros años, incluso negándose a convocar a comisión directiva de Quilmes y sacando pronunciamientos y llamados solos desde la AyB en nombre de toda la directiva.
Sobre esto, le hemos insistido a Tribuna Docente (PO) con quienes compartimos el Frente de Izquierda, durante el año en la necesidad de hacer conocer en forma conjunta a la docencia de Quilmes estas diferencias que se plantearon y batallar por torcer el rumbo al que quieren llevar a la seccional, porque son de suma importancia para pelear en los sindicatos por una política independiente que impida que la crisis la paguemos los trabajadores. Lamentablemente los compañeros consideraron este planteo como rupturista, cuando en realidad esta asamblea ordinaria mostró que el rupturismo es de la Azul y Blanca.
Por primera vez, en esta asamblea, los dirigentes del PCR (Azul y Blanca), plantearon claramente que había que unirse con el PJ para sacar a Macri. Esto es nuevo, y constituye un punto clave y un salto en calidad rompiendo en uno de los aspectos fundantes de la Multicolor: la independencia de clase, la independencia de toda variante política empresarial.
Desde la Marrón continuaremos poniendo nuestros esfuerzos y militancia para construir una alternativa a esta política, buscando la coordinación de las luchas en curso, peleando por la más amplia democracia en los sindicatos y por un programa anticapitalista de salida a la crisis.