Con el pan dulce en la mesa, la gestión de la UNR dirigida por el rector Franco Bartolacci de la Franja Morada, quiso aprobar memorias y balances dibujados que nada tienen que ver con la realidad de las y los miles que a duras penas tratamos de mantenernos en la universidad pública. La universidad que viene entre el ajuste del gobierno y el FMI
Jueves 23 de diciembre de 2021 17:22
El día de ayer 22 de diciembre se llevó a cabo la Asamblea Universitaria luego de dos años en la Facultad de Arquitectura.
La gestión morada, encabezada por Franco Bartolacci, como durante toda la pandemia, trató de vender un discurso donde la Universidad Nacional de Rosario en el transcurso de la pandemia “expandió sus fronteras”, que avanzó con el compromiso democrático, en la inclusión, y con una gestión que fue "revolucionaria" con la idea de que vamos hacia una “normalización” sin mayores sobresaltos.
¿Qué Universidad ve el rector?
La realidad contrasta y mucho con ese discurso. Según datos de la UNR, uno de cada dos estudiantes de la universidad tuvo que dejar sus estudios. Y es que la universidad no está por fuera de la crisis social y económica que atraviesa nuestra sociedad que la pandemia agudizó. Con una precarización laboral creciente del claustro docente y sueldos cada vez más bajos, con un presupuesto educativo cada vez más devaluado y con una política de becas totalmente insuficiente, dispositivos y conectividad para estudiantes y la comunidad educativa, hizo que seguir cursando sea una verdadera utopía para los y las miles que fueron barridos en la virtualidad. Dejó al descubierto que el relato de “universidad inclusiva” de la gestión, es con elitización de la educación.
Además durante la pandemia, la democracia universitaria brilló por su ausencia. Las decisiones que tomó la gestión de la universidad de la UCR y el PJ, fueron a espaldas de toda la comunidad educativa de la UNR, en mesa chica, sin someter a discusión al conjunto de la comunidad como iba a ser la vida universitaria, qué rol que podría jugar la universidad en la sociedad en el marco de una pandemia, qué políticas para paliar las condiciones en las que iban a trabajar los docentes o cómo íbamos a cursar los estudiantes. Esto llegó al colmo de que durante largos meses ni siquiera funcionaron como tales los organismos de cogobierno de la universidad. Si hubo continuidad de las actividades universitarias y de la educación pública fue debido al gran esfuerzo hecho por docentes y no docentes, quienes vieron precarizadas sus condiciones de trabajos, con aumentos de las horas laborales, haciéndose cargo de la conectividad y dispositivos por sus propios medios.
También se votó la creación de una nueva escuela preuniversitaria de ciencias sociales y humanísticas, aprobada unánimemente, pero con un apoyo crítico de COAD, Patria Grande y el Frente de Izquierda, remarcando que es necesario democratizar la discusión sobre la currícula, ubicación, etc… Además de destacar que se tienen que aclarar y concursar los cargos que allí se creen para resguardar los derechos de lxs trabajadorxs.
¿Y las conducciones estudiantiles?
Lo que tampoco sorprendió, fueron las intervenciones de las conducciones de los centros de estudiantes y la Federación Universitaria de Rosario (FUR) dirigida por agrupaciones estudiantiles integradas al gobierno nacional como el Alde y Patria Grande que se dicen "independientes". Durante la pandemia hicieron la plancha para organizar al movimiento estudiantil por sus demandas y también frente al ajuste del gobierno nacional a los jubilados, trabajadores, contra el extractivismo. La deserción estudiantil no estuvo en las intervenciones de los consejeros del Alde que hablaron del FMI pero no dijeron nada sobre romper y no seguir pagando esa deuda ilegal y fraudulenta. Plantearon una serie de medidas que no por necesarias, dejan de ser absolutamente insuficientes, como la creación de 300 cargos docentes, en una universidad donde existes ¡2000! docentes trabajando ad honorem.
Patria Grande intervino en la misma sintonía, no solo no nombraron la deserción estudiantil, sino que reconocen abiertamente el carácter ilegítimo de la deuda pero sostienen que hay que pagarla "con mejores condiciones" ,en la misma sintonía que algunos sectores del gobierno nacional pero consolidando la estafa macrista a costa de las grandes mayorias.
La Mate Cocido directamente no intervino en la asamblea, siendo que luego de dos años y pandemia por medio y siendo parte de la conducción de la FUR, actúan como si los estudiantes no tuviésemos mucho para decir luego de que nos veamos barridos de la universidad.
¿Cuánto más van a esperar las conducciones de los centros que dicen oponerse a las políticas de ajuste para salir a pelear por la educación y contra la deserción? ¿Que van a hacer para enfrentar la crisis que nos golpea y que nuestros abuelos y nuestras familias no pasen hambre? ¿van a priorizar sus alineamientos nacionales antes que las penurias de miles de estudiantes?
En la propia asamblea universitaria no le respondieron a una sola cosa de un rector que parece que está en Disney cuando habla de la realidad de la UNR. Es necesaria una FUR y centros de estudiantes combativos que organicen a las y los estudiantes en unidad con los docentes para enfrentar los planes del FMI junto a los gobierno nacional y la oposición
Los consejeros del Frente de izquierda, Lautaro Habibi y Federico Pascual son los que denunciaron la realidad que vive 1 de cada 2 estudiantes que queda afuera de la universidad pública, el esfuerzo silenciado que llevan adelante los docentes y no docentes para garantizar el cursado durante los dos años, la precarización que hay en las facultades con el trabajo de 2000 cargos ad honorem, a pedido del FMI para que se pague la deuda externa. También llevaron la lucha del pueblo chubutense donde luego la asamblea universitaria tuvo que pronunciarse a favor unánimemente.
El triunfo en Chubut contra la avanzada de la megaminería por el gobernador Arcioni, es un gran ejemplo de lucha, donde la unidad entre trabajadores y la juventud, organizados y en las calles, mostraron que se puede enfrentar los planes de los gobiernos y los empresarios en contra del pueblo. Estos son los ejemplos que la juventud y el movimiento estudiantil tiene que tomar en sus manos, en una ciudad donde se cortó el puente rosario victoria para decir que paren de quemarnos los humedales, que los humedales valen más que la ganancias de unos pocos y donde desde la juventud jugamos un rol preponderante.
Esta es la perspectiva que tenemos desde En Clave Roja-PTS en el Frente de Izquierda, organizarnos, juntos con quienes quieran enfrentar el ajuste en curso que lleva a cabo el gobierno, de la mano de la oposición de derecha y el FMI, que ya se siente fuerte, pero que va a empeorar con el pago de la deuda fraudulenta contraída por el macrismo. No podemos permitirnos no plantarle resistencia, porque va a significar el empobrecimiento de millones, profundizar la precarización laboral, recortar jubilaciones, etc… ¿Quién va a poder seguir estudiando en esas condiciones?
La multitudinaria marcha el 11 de diciembre, convocada por la bancada del Frente de Izquierda junto a más de 100 organizaciones que llenaron las plazas de todo el país, y el enorme triunfo obrero y popular en Chubut marcan el camino para resistir y enfrentar los planes del Fondo Monetario Internacional, el movimiento estudiantil tiene el desafío de cumplir un rol importante en la etapa que se viene y tenemos que organizarnos en todas las facultades para pelear por nuestro futuro.