En las últimas semanas miles de estudiantes de diferentes escuelas de la UNAM nos hemos organizado en asambleas para discutir cómo luchar contra la violencia hacia las mujeres que vivimos todos los días en nuestras escuelas, en un país en el que al día 10.5 mujeres son víctimas de feminicidio y en el que el aborto no es legal más que en dos entidades.
Martes 11 de febrero de 2020
La Rectoría de la UNAM, los directores y el mismoPresidente López Obrador, han salido ha decir que estamos siendo manipulados, intentando deslegitimar nuestra legítima rabia. Han impuesto extramuros en prepa 9 y el cierre del semestre en Filosofía y Letras, además de haber anunciado que levantarían denuncias penales contra quienes nos organizamos.
En CCH Sur las autoridades no son diferentes. Acá, como en los demás bachilleratos, son ellos quienes les pagan a los porros para que golpeen y atemoricen a la comunidad estudiantil.
Son los directivos quienes hostigan a los trabajadores que denuncian los desvíos de fondo y utilicen a estudiantes a base de darles ciertos privilegios para desarticular al movimiento estudiantil.
Hoy amenazaron con utilizar urnas para decidir sobre aspectos que hacen a la organización de los estudiantes y nuestros métodos de lucha -como lo es el paro y los cubículos- es una total violación a nuestro derecho de organizarnos de manera independiente de las autoridades, que con esta maniobra buscan fragmentar al estudiantado.
Los cubículos estudiantiles han sido tomados y utilizados en momentos importantes de lucha en defensa de la educación, como lo fue la huelga del 99. Hoy deben estar abiertos al conjunto de estudiantes e incluso de trabajadores y maestros y funcionar como herramientas para la organización independiente de la dirección, para hacer proyectos culturales, trabajo político, espacios de discusión, etc.
No permitamos que las autoridades los utilicen para darles más privilegios a los alumnos enlace, abramos los espacios al conjunto de la comunidad.
En la última asamblea, cientos de estudiantes votamos nuestro repudio a que los paros fueran votados en urnas, esto impide que haya un espacio donde todos y todas podamos escucharnos y conocer la opinión política de nuestrxs compañerxs así como plantear la nuestra para decidir democráticamente el rumbo de la lucha, que no se limita a si hay o no paro.
Las asambleas son espacios de autoorganización que nos fortalecen como movimiento estudiantil, por eso las autoridades llaman a votar sin discusión política.
Asiste a la asamblea convocada para discutir nuestras demandas y cómo luchar por ellas el miércoles a la 1 en el plantel.
Desde la Agrupación Juvenil Anticapitalista y la agrupación de mujeres y diversidad sexogenérica Pan y Rosas, te invitamos a que nos conozcas y luchemos juntxs contra la violencia hacia las mujeres: por guarderías para las madres que estudian y trabajan en CCH, por transporte gratuito a los metros cercanos y zonas periféricas, por un protocolo de género que no se base en el castigo -el cual controlemos a través de una comisión tripartita independiente de las autoridades y con apoyo de especialistas-. Luchemos también por salarios y condiciones de trabajo digno para maestrxs y trabajadorxs, porque la precarización laboral también es violencia.
