Hoy la CUT llama a una "huelga general sanitaria" y todavía no tiene un plan concreto para garantizarla, ¿será otro paro simbólico sin movilización ni paro efectivo?
Sábado 17 de abril de 2021
No sólo nosotros, las y los trabajadores de la salud, estamos expuestos al Covid, agobio y la sobreexplotación. Los portuarios, por ejemplo, se movilizaron recientemente por condiciones mínimas frente al pandemia, incluso con compañeros enfermos. Los trabajadores del transantiago que cuentan decenas de contagios y compañeros fallecidos también, o los y las trabajadoras agrícolas de Frusur, movilizadas por no pago de sueldos en plena pandemia, también mineros y trabajadores del metro se han movilizado, solo para poner algunos ejemplos más recientes. Sin embargo, todas estas luchas no han sido coordinadas, y aparecen aún como peleas aisladas.
En el caso de las y los trabajadores de la salud, venimos denunciando fuerte el agobio laboral desde distintos lugares: la atención primaria y los hospitales. Por eso decimos #NoSomosRobot y nos movilizamos con carteles, protestas, minutos de silencio logrando visibilizar el problema. Hoy la CUT llama a una "huelga general sanitaria" y todavía no tiene un plan concreto para garantizarla, ¿será otro paro simbólico sin movilización ni paro efectivo?
El ejemplo de Neuquén
En Argentina, en la provincia de Neuquén, los trabajadores de la salud de distintos hospitales y estamentos encabezan hace más de 40 días una fuerte movilización, coordinados con otros sectores obreros (como ceramistas, sindicatos y federaciones), y la propia población que ha solidarizado con ellos en cortes de calle y movilización. Superando a sus direcciones sindicales amarillas, que los habían vendido con un reajuste salarial miserable, desarrollaron la coordinación de base y las asambleas interhospitalarias. Muchos trabajadores de la salud queremos seguir el ejemplo de Neuquén.
Por un paro efectivo nacional
La crisis sanitaria y económica es tan grave que resulta intolerable y es urgente enfrentar a este gobierno precarizador. La CUT debería garantizar la preparación de la huelga con comités, asambleas y coordinadoras. Lo mismo deberían realizar otras organizaciones como la Unión Portuaria y el Colegio de Profesores. Los trabajadores de la salud de Neuquén nos muestran un ejemplo a seguir.
A su vez, los sindicatos deben coordinarse con las organizaciones de mujeres como la coordinadora 8M y las organizaciones populares de ollas comunes y comités de vivienda.
Para pelear en serio por la salud del pueblo trabajador, hay que conquistar un Plan de Emergencia frente a la pandemia
Un paro nacional de trabajadores es urgente para luchar por nuestras demandas. Un plan de salud, trabajo y derechos sociales de emergencia para paliar la crisis. Este plan debe partir por un Sistema Único de Salud, donde el público absorba al sistema privado, sus clínicas y laboratorios; para ponerlo todo bajo la gestión y
administración, de las y los trabajadores, las comunidades científicas y los usuarios. Nunca más en las manos de Ministros incompetentes, segundones del presidente.
Esto debe financiarse con un impuesto sobre las principales fortunas, como la de Luksic o el propio Piñera, que se incrementaron obscenamente durante la pandemia. Un impuesto progresivo que apunte a la expropiación completa de las mismas. Para así financiar este plan de emergencia, que contemple una renta básica universal por sobre los 550 y la prohibición inmediata de todos los despidos; la condonación inmediata de todas las deudas bancarias, tarifas de luz, agua y gas; el fortalecimiento de la salud pública a través de la inversión en infraestructura, un plan de nuevas contrataciones de personal sanitario para enfrentar la carga laboral y el paso a planta de todos los trabajadores de la salud. Porque basta de que la crisis la siga pagando el pueblo trabajador.
¡Nuestras vidas valen más que sus ganancias!
