El transcurso de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte ha presionado cada vez más a la administración Trump a establecerlo como una de sus nuevas prioridades de agenda.
Lunes 30 de julio de 2018
Pasaron pocos días desde que se retomaron las negociaciones para un nuevo Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
A pesar de esto representantes de la administración del actual gobierno encabezado por Donald Trump han manifestado una intención de “priorizar” el cierre de las negociaciones lo más pronto, de ser posible, antes de las elecciones próximas de su país.
En sintonía con lo que también manifestó la delegación mexicana previo al inicio de los encuentros, funcionarios como el actual Secretario del Tesoro Steven Mnuchin enfatizaron que las pláticas están encaminadas y abordadas como la prioridad número uno en las tareas de la administración actual en materia de comercio exterior.
Los encuentros y las declaraciones que muestras los actuales negociantes de esta primera etapa bilateral entre México y EE.UU. muestran una posible coincidencia en torno a la salida de este tortuoso trayecto, próximo a cumplir su aniversario.
Entre algunos de los elementos que más destacaron sobre el fruto de esta nueva etapa del proceso de negociaciones, se cuenta el contacto entre los negociantes estadounidenses con la futura administración nacional del país latinoamericano negociante.
Con la presencia de Jesús Seade el gabinete de Andrés Manuel López Obrador entra por primera vez en contacto con los representantes del mandatario que hasta ahora viene imponiendo unas medidas muy agresivas contra la población migrante en suelo estadounidense, mientras que en materia de comercio exterior también muestra una actitud beligerante donde destacan aranceles a diversos productos ya en funcionamiento.
No obstante, Larry Kudlow, presidente del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, hizo pública su confianza en que los acuerdos se logren en un periodo próximo con su vecino del sur, México, el cual parece ser el centro de atención justo en el momento en que se está llevando a cabo una “transición ordenada” que sin falta aborda este importante aspecto que involucra las economías del norte del continente.
Resalta por un lado que, a voluntad de la principal potencia de la región del norte, viene imponiendo la modalidad bilateral como principal herramienta de presión para imponer con mayor margen su voluntad los demás integrantes del trato, pese a que los gobiernos de México y Canadá han insistido en una versión trilateral de negociación, sin mucho éxito por ahora.
Es por eso que en todas las conversaciones resultó por su ausencia todo tipo de referente a la economía del maple. Se espera que los representantes del gobierno canadiense se incorporen a las pláticas una vez se haya dado una cierta estructura a las negociaciones entre la sección baja de América del Norte, aunque este encuentro por ahora no tiene una fecha definida.
Por otro lado, el actual presidente de México afirmó que de continuar con la forma en la cual se ha abordado el tema se podría ver e implementar un nuevo TLCAN en el mes de agosto del presente año.
Enrique Peña Nieto declaró que la incorporación de los elementos propuestos por el virtual presidente electo que encabeza la formación Morena son de enorme importancia y si lo anteriormente señalado se cumple y se finaliza la negociación apostaría por un “festejo en conjunto” entre estos integrantes.
Jesús Pegueros
Estudiante de la Facultad de Economía de la UNAM
