Con una masiva movilización, en el marco de la convocatoria nacional lanzada por doscientas organizaciones, en las calles de la ciudad se expresó el rechazo al pacto que el peronismo y Juntos por el Cambio sellaron en el congreso para avalar la deuda fraudulenta y avanzar en un cogobierno con el Fondo Monetario Internacional.
Viernes 11 de marzo de 2022
Mientras peronistas y macristas montaban un show de acusaciones en el congreso luego de días de rosca y negociaciones para sellar un pacto que ata el futuro del país al co-gobierno con el FMI, y los medios de comunicación hegemónicos a ambos lados de "la grieta" se esforzaban por demonizar a quienes pelean contra esta entrega, en las grandes ciudades de la Argentina se movilizaban de a miles quienes rechazan que los trabajadores y el pueblo pobre paguen por la deuda ilegal e ilegítima que tomó el gobierno de Macri para financiar la fuga de capitales y los negocios de unos pocos.
Bahía Blanca no fue la excepción, y mas de mil personas convocadas por la CTA, los partidos del FIT-U (PTS, PO, IS, MST) y demás organizaciones sindicales, políticas, sociales, de la mujer y estudiantiles como la Secretaría de DDHH del CEHum lo hicieron sentir en el centro político de la ciudad.
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En las distintas intervenciones que llevaron a cabo referentes de las organizaciones convocantes, se denunció cómo un acuerdo de estas características no va a llevarse adelante sin ajuste, pese a las promesas del gobierno, y cómo las exigencias del fondo van a contramano de las demandas que expresan los barrios populares por viviendas e infraestructura, de la necesidad de nuevas escuelas y jardines para garantizar el acceso a la educación de miles de niñas y niños, de salas médicas que se ocupen de su salud.
También se habló de la precarización laboral, un problema estructural en la Argentina que, de la mano del FMI y sus intenciones de avanzar en reformas laborales (en un acto de cinismo, el gobierno y las burocracias sindicales quieren esconderlas bajo el eufemismo de "revisión de convenios colectivos") para quitarle derechos a la clase trabajadora beneficiando a los grandes empresarios, no hará mas que profundizarse. Esto afectará en primer lugar a las mujeres y a la juventud, como explicaba Clara Aldea, militante de la Juventud del PTS, integrante de la Secretaría de DDHH del CEHum, cuando decía que "Sabemos perfectamente que esto implica mas ajuste para nosotrxs, mayores dificultades para poder seguir estudiando, pagar nuestros alquileres, mas precarización. Una reforma laboral que ya se da de hecho, que se va a profundizar con los requisitos que sabemos que va a exigir el fondo en nuestro país"
Daniela Rodriguez, miembro de la Comisión Directiva del SUTEBA local y dirigente de Pan y Rosas y el PTS en el Frente de Izquierda, explicó la gravedad del pacto alcanzado por el gobierno y la oposición de derecha para avalar la estafa de la deuda con el Fondo: "El FMI tendrá en sus manos la posibilidad de extorsionar con dejar al país en “default” cada tres meses con las "revisiones" de nuestra economía, pidiendo más ajustes y reformas bajo el chantaje de no desembolsar fondos. Quieren hacernos creer que es este acuerdo o el caos, pero llegamos a esta situación con el 60% de los niños pobres, con la juventud precarizada o sin empleo, y con nuestros abuelos cobrando jubilaciones de miseria".
Refiriendose al golpe que esto presupone para las condiciones de vida de las mujeres y disidencias, planteó que "El acuerdo viene a empeorar también la situación en la que ya nos encontramos millones de mujeres: jefas de hogar sin vivienda, madres solas con salarios por debajo de la canasta familiar, recortes a los subsidios y planes con los que se sobrevive en los barrios más pobres, reducción de presupuesto para la prevención de la violencia de género, para la ESI, para la implementación de la IVE, o del cupo laboral trans"
Luego de las intervenciones, la marcha por el centro bahiense dejó entrever que no hay motivos para resignarse a dejar nuestras vidas en manos del Fondo, de los bancos ni de sus cómplices en la Casa Rosada y el Congreso, que esta pelea por definir qué futuro deseamos para la clase trabajadora, las mujeres, la juventud, recién empieza y que necesitamos ser miles en las calles, los sindicatos, los barrios, los centros de estudiantes, para imponer una salida favorable a las mayorías populares terminando con la decadencia nacional. En este sentido se expresó la referente de la izquierda: "El Frente de Izquierda rechaza la aprobación del pacto en el Congreso y viene denunciando la rosca a espaldas del pueblo. Ponemos todas nuestras fuerzas para construir la respuesta en las calles. Apostamos a la movilización para frenar el pacto con el FMI, poniendo en pie un gran movimiento de lucha en todo el país. En ese camino, esta jornada es clave junto a las del 11 de diciembre y el 8 de febrero donde mostramos que hay otra salida, de lucha y organización, la única realista si queremos dar vuelta la historia y evitar un nuevo saqueo. Hay que romper con el FMI y hacer un desconocimiento soberano de la deuda, con medidas de emergencia como la nacionalización de la banca y del comercio exterior, así como la estatización bajo control obrero de los recursos estratégicos del país, en el camino de un Gobierno de los trabajadores que reorganice la sociedad en función de las necesidades de las mayorías, y no de los intereses de unos pocos."
