Las últimas cifras entregadas por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) son preocupantes, pero no para los empresarios.
Miércoles 1ro de marzo de 2017
Se contrajo la producción industrial, cayendo 0,9% en enero, donde en el caso de los sectores de la minería y manufactura, fue especialmente pronunciada la caída.
En el caso del empleo, este sigue precarizándose, alcanzando el desempleo el 6,2%, aunque esto dentro de lo esperado. Sin embargo esa es la cifra global, por lo que hay que mirarla más de cerca: Se sigue destruyendo el trabajo asalariado, el cual decreció 1,2%, compensado por el alto crecimiento del trabajo por cuenta propia, el que subió 5,5%. Este es el más precarizado, es decir, inestable, sin seguros sociales, del día a día. Todo esto contrastando con las ganancias empresariales, donde en el caso de las de la banca, estas crecieron ¡¡43,7%!!, llegando a los 228 millones de dólares en el mese de enero. Además, en medio del nuevo desastre del agua del que son responsables las empresas, sale a la luz pública como un sector que por ley, tiene ganancias aseguradas, con un piso de 7%.
De todos modos, sus ganancias el último año se elevaron hasta la estratósfera con un 22%. Y para colmo, las inversiones indispensables para que no sigan habiendo cortes de agua, las cobran a los consumidores, aumentando la boleta que cada mes hay que pagar.