El paro docente en su tercera semana estuvo marcado por la mesa tripartita y el protocolo de acuerdo, destacó también por la multitudinaria marcha nacional que convocó a más de 100 mil personas y porque tuvo asistencia de delegaciones de todo el país. Además, se realizó la Asamblea Nacional el día jueves, donde se definió la continuación del paro indefinido a discutir el próximo miércoles 24 de junio.
Sábado 20 de junio de 2015
La base docente el 11 de mayo manifestó su rechazo al proyecto de la Carrera Profesional Docente presentada por el Gobierno (97%), a través de una consulta nacional, luego se reafirmó su rechazo con la votación mandatada desde las bases en la Asamblea Nacional que por mayoría definió el retiro del proyecto. Sin embargo, el directorio del Colegio de Profesores ha dejado la puerta abierta para matices como “indicaciones”, “modificaciones”, “suspensiones”, “rediseño”, siendo que la demanda central de los docentes movilizados es el retiro.
El paro docente ha mostrado la fuerza de la base, la intransigencia del Gobierno, la conciliación del Parlamento y la disposición a matices de la dirección del gremio,encabezada principalmente por la línea de Jaime Gajardo. Esta semana se agregó un nuevo elemento a través de los medios de comunicación y su cuestionamiento al paro, pues ya comienzan referirse a las pérdidas de dineros, para así desviar la discusión de calidad de la educación, que es a lo que se refiere este proyecto, y ha sido el motor el paro docente pues empeoraría las condiciones para la pedagogía, a los costos del paro.
Muestra de fuerza de la base
La base, por su lado, despliega la fuerza que la caracteriza desde la rebelión de las bases, cuando se rebeló contra sus direcciones de la Nueva Mayoría (PC, PS, DC, PPD, PR), que pretendían bajar el paro indefinido de los cinco puntos de la agenda corta, tras un llamado de la subsecretaria del Mineduc Valentina Quiroga. Las marchas nacionales han tenido una asistencia de 70 mil personas la primera semana, 150 mil personas la segunda semana, y más de 100 mil personas la tercera semana, esta ultima caracterizada por las delegaciones que viajaron de todo el país para hacerse presente en la actividad. A lo que se suma las diversas iniciativas a nivel nacional, que van desde marchas, ollas comunes, hasta corte de ruta.
Esta última semana la convergencia entre profesores y estudiantes, ha superado el llamado a marchar en conjunto del Colegio de Profesores y la Confech, se han fortalecido asambleas de movilizados donde discuten profesores y universitarios; también un importante ejemplo es la votación de paro indefinido de la Universidad de Antofagasta en apoyo al paro docente, paro promovido por las carreras de la Facultad de Educación de dicha universidad, que hoy organiza acciones en común con profesores.
La mesa tripartita y el protocolo de acuerdo
La primera semana el Gobierno se negó a modificaciones y llamó a los docentes a seguir el trámite en el Congreso en conversaciones con los parlamentarios. En la segunda semana de paro el MINEDUC “flexibilizó” su postura, mostrándose dispuesto a indicaciones y asistiendo a la Comisión de Educación, encabezada por Camila Vallejo (PC) de la Cámara de Diputados, lo que le costó la crítica de los parlamentarios de derecha que no están de acuerdo con las movilizaciones, y que además le recomendaron no retirar el proyecto, pues eso ponía de rodillas al Gobierno. Sin embargo, el ministro Eyzaguirre declaró que no iban a invertir más recursos.
En este contexto, fue el propio directorio nacional quien entregó oxígeno a las autoridades con la propuesta de “suspensión” de la votación del proyecto para julio, propuesta acogida por los parlamentarios, los que además plantearon la conformación de una mesa tripartita. Por ello, no es raro que las dirigencias “valoren” las instancias instaladas por las autoridades. A ello se agrega las declaraciones de presidente del Partido Comunista, Guillermo Tellier, quien dice tener desacuerdo con la base docente que exige el retiro del proyecto.
En la tercera semana de paro marcada por la discusión de lunes y martes en la mesa tripartita, la instancia concluyó en que el día miércoles parlamentarios y Gobierno propusieron un “protocolo de acuerdo”, que fue enviado al finalizar el día, y que tuvo discusión el jueves 18 en la Asamblea Nacional del Colegio de Profesores.
Protocolo de acuerdo y la Asamblea Nacional
La propuesta de protocolo de acuerdo plantea las “condiciones básicas para continuar la tramitación”, el documento trata los 11 puntos planteados por el directorio del CdeP en la Comisión de Educación, el cual no da respuesta a las demandas más sentidas de los docentes, sino que se reacomoda sin afectar la esencia de mercado del proyecto.
Por ejemplo, el primer ítem “sobre el fortalecimiento de la educación inicial”, dice que para asegurar “buena” educación se necesita de evaluación, que al tiempo de asegurar la cantidad de docentes, midan el valor agregado de cada universidad. En un siguiente punto se indica que las universidades deben ser evaluadas por CNA, pero no dice qué malla ni qué infraestructura es la necesaria para impartir la carrera. También este ítem incluye la propuesta de evaluación diagnóstica al inicio para nivelar y a la mitad de la carrera para orientar acciones remediales.
Pareciera ser un anuncio de buena fe, pero lo propuesto en el ítem no cambia la lógica de mercado del proyecto, se mantiene el desarrollo de exámenes estandarizados que definirán la calidad de la formación del docente sin considerar cuál debe ser la formación del docente, así se etiqueta a las futuras generaciones para realizar un ránking de competencia, que probablemente también defina el tramo salarial en la CPD. Los estudiantes de pedagogía y profesores han dicho retiro de la carrera, porque de lo que se trata es que la formación inicial docente sea un sistema estatal, unificado y gratuito, única forma de asegurar una formación inicial docente al servicio de los hijos de los trabajadores.
Lo mismo sucede con el resto de los puntos: sobre las condiciones del proceso de encasillamiento sólo readecuaron, pero no sacaron ni agregaron nada, se cambia un nombre por otro, “certificación” por “reconocimiento”, pero el fondo sigue siendo el mismo. Si bien, se plantea que lo único necesario para ejercer es el título, se mantiene la inducción y mentorías, premian a quienes salen destacados dos veces seguidas por lo que no realizaría la siguiente evaluación. Además, plantean asegurar uso de horas no lectiva ,pero ¿cómo? Dan la posibilidad de avanzar en cinco años a un tramo avanzado, y aseguran que la asignación de tramo deberá ser de una magnitud comparable al sistema actual.
También dicen incorporar a las profesoras parvularias a la carrera en un plazo “razonable” y que a aquellas que le falten 10 años para jubilar, pueden voluntariamente entrar a la carrera. Por otra parte, dejan en suspenso la cantidad de alumnos por sala, una mesa para evaluación docente, la ley de nueva carrera directiva, y el proyecto para mejor estabilidad del trabajo docente.
Es decir, se menciona muy parcialmente parte de las demandas docentes, pero dentro del mismo proyecto no cambia nada en esencia, y otras demandas centrales se dejan para futuras discusiones y mesas técnicas.
En este contexto, la Asamblea Nacional finaliza con un documento elaborado por el directorio, firmado por Jaime Gajardo y Darío Vásquez, vicepresidente, donde se manifiesta que lo principal para el magisterio es la “tramitación del proyecto de ley consulto sobre la carrera profesional docente”, y aseguran que el paro se encuentra con un 80% de adhesión.
En la Asamblea Nacional se resolvió: 1) La mayoría aprueba un voto de acuerdo por la unidad y el “respeto a la institucionalidad”, 2) por unanimidad se aprueba mantener la paralización indefinida y el retiro, 3) valoran el documento de la comisión de educación como el primer paso para la condición de un “rediseño” del proyecto, 4) realizar proceso informativo y análisis del documento y 6) realizar una Asamblea Nacional extraordinaria para el miércoles 24 de junio.
Lograr el retiro del proyecto sigue estando en manos de la fuerza de la base, es ella la que esta semana debe mantenerse fuerte, coordinarse con los estudiantes universitarios y secundarios, aumentar la organización y tomar en sus manos el llamado a los docentes que aún no están en paro, para que de este proceso de lucha se conquisten las demandas históricas de los docentes, pues no hay nada que perder y mucho por ganar con esta importante movilización que ha logrado concentrar sólo en Santiago a más de 200 mil personas y acciones coordinadas a nivel nacional.
