La cúpula de Bankia ha decidido devolver con intereses todo el dinero de los pequeños accionistas que acudieron a la salida fraudulenta que la entidad hizo en bolsa. Esto significa un desembolso de unos 1.840 millones de euros. Pero, ¿de dónde sale ese dinero?
Miércoles 17 de febrero de 2016
El quid de la cuestión reside en que el Tribunal Supremo dio la razón a dos accionistas sobre la información errónea que había en el folleto de la salida a bolsa. A partir de ello, la Entidad se espera un aluvión de juicios que pueden generarle un sobrecosto de unos 500 millones de euros.
Es necesario recordar la fuerte campaña que Rato, expresidente de Bankia, hiciera por la salida a bolsa y el saneamiento del banco. Todos recordaremos su imagen haciendo sonar la campana. Tampoco hay que olvidar que fue Rodríguez Zapatero quien incitó a la venta de acciones.
Entonces, a partir de mañana los pequeños accionistas tendrán tres meses para solicitar dicha devolución y dejar de lado cualquier reclamo judicial. Bankia ya tiene una provisión de fondos suficiente para hacer frente al total de las devoluciones. Además la entidad se compromete al reintegro del dinero en el plazo de 15 días, desde la presentación de la solicitud.
¿Quién paga el desaguisado?
El 60% de estas devoluciones se hará con dinero público. El mayor accionista del banco es una empresa nacionalizada por Rajoy que se llama BFA (Banco Financiero y de Ahorros). Es decir, que la anunciada devolución del dinero saldrá mayoritariamente de lo que pagamos todos con los impuestos.
Una vez más los trabajadores y el pueblo tenemos que pagar la gestión desastrosa y la corrupción generalizada. Durante años hemos sufragado los salarios estratosféricos de los directivos de Bankia (y todas las cajas), los millonarios gastos de las tarjetas opacas, el vaciamiento de las cajas a través del pelotazo urbanístico.
Han hecho de todo con las cajas y desde hace unos años nos están tirando todas las pérdidas. Más de 100.000 millones de euros que se suman a la deuda pública que ya casi alcanza el 100% del PIB. Deuda que pagamos con unas condiciones leoninas impuestas por la Troika. Deuda que significa un paro por encima del 20%, caída drástica de la sanidad y la educación, y un inacabable etcétera.
Expropiar a los expropiadores
Lo cierto es que entre los gobiernos del PSOE y del PP han hecho que la situación de miles y miles de familias trabajadoras sea desastrosa y que millones suframos para llegar a final de mes. Mientras un puñado de ricos y empresarios ganan hoy mucho más dinero que antes de la crisis.
Ahora se trata de parar esta sangría, este saqueo y recuperar lo perdido. Se trata de que los trabajadores y el pueblo no sigamos pagando la crisis. Se trata de cortar con el saqueo que los bancos y las grandes empresas hacen de los recursos públicos. En fin, se trata de expropiar a los expropiadores.
