Las autoridades del Banco Provincia anunciaron hace un mes los “nuevos modelos de gestión”. Degradación de las condiciones de trabajo e incumplimiento del Convenio Colectivo en consonancia con el ajuste del gobierno de Macri y Vidal.
Miércoles 5 de septiembre de 2018 15:49
El 1º de agosto los trabajadores del Banco Provincia de Buenos Aires recibieron una notificación sobre los “nuevos puestos de unidades de negocios”. Esto fue presentado como una simple modificación del esquema de puestos, que resultaría en la “modernización” del banco y el aumento de su rentabilidad, uno de los principales objetivos de la actual gestión.
Sin embargo esta “reasignación de funciones” y el pago de los adicionales por tarea implican de hecho una devaluación de las categorías escalafonarias y la modificación de la carrera bancaria.
Esto incumple el acta 329/88 firmada en octubre del año pasado ante el primer intento del directorio de imponer esta nueva estructura, que obligaba a la apertura de una mesa de discusión que incluya al sindicato.
Este no es un ataque aislado. En el últimos años ha avanzado la tercerización de funciones en beneficio de la empresa privada Grupo Provincia, dirigida por Jorge Macri, en donde por ejemplo se cedieron funciones como pago de impuestos y jubilaciones a Provincia Net. Allí los trabajadores no gozan del convenio bancario sino del de comercio, con bajas condiciones de seguridad.
Por otro lado Provincia Net tiene un despedido y Provincia Seguros ya lleva 200 despidos desde 2016, mientras a los empleados del banco les aumentan las pautas de ventas de seguros.
Esto se condice con el proceso de desfinanciamiento del Banco iniciado con la reforma previsional. Esta reforma obliga al Banco a solventar el déficit de su caja jubilatoria, déficit que de acuerdo al Art. 40 de la Constitución debe absorber la provincia.
Este desfinanciamiento solo se profundiza con el relanzamiento de la campaña de “50% en supermercados”, que solo en el mes de julio implicó un gasto de 90 millones de pesos al Banco en beneficio de las grandes cadenas de supermercados y del rédito político de la gobernadora Vidal.
Al mismo tiempo la gobernadora y el presidente del Banco, Juan Curutchet, le niegan al Astillero Río Santiago la renovación del préstamo que les permitiría preservar los 3500 puestos de trabajo.
En diálogo con La Izquierda Diario, Fabiana Sotelo (trabajadora del Banco Provincia e integrante de La Marrón Bancaria) declaró que “está claro que el directorio y la gobernadora Vidal quieren un banco en beneficio de la ganancia de los empresarios. Esto es en el marco de un ataque a todos los trabajadores con un endeudamiento descomunal y una brutal devaluación de nuestros salarios con una inflación que no para de crecer. En el caso del Estado con el cierre de los ministerios de Salud y de Trabajo entre otros”.
“No podemos permitir que sigan avanzando sobre nuestras condiciones de trabajo y sobre el banco público”, afirmó Sotelo y exigió “a La Bancaria y a la Comisión Gremial Interna que terminen con la pasividad y la desmoralización. Necesitamos un plan de lucha real para derrotar el plan económico del macrismo y el FMI, discutido en plenarios de delegados y asambleas en todas las sucursales. Necesitamos unificar con el resto de los trabajadores y el pueblo como los docentes y estudiantes que marcharon masivamente la última semana, de los ministerios que han cerrado que están haciendo masivas asambleas, o del propio Astillero Río Santiago que ya llevan algunas semanas con distintas medidas de lucha”.
Por último la trabajadora planteó la necesidad del “pase a convenio bancario de todos los tercerizados. El ataque es ahora y el momento de salir a luchar también, está claro que son ellos o nosotros. No podemos esperar a 2019, que la CGT llame a un Paro General Activo ya”.
