La Matanza. Barrio Las Casitas: más de 5000 personas sin agua potable

El barrio Las Casitas pertenece a la localidad de González Catán, en el municipio de La Matanza.
Cuenta a La Izquierda Diario Barbara, vecina del barrio, que el tanque que abastece a las 5000 personas que viven allí no funciona.
"Es una bomba de tiempo en medio del crecimiento de los casos de coronavirus en los barrios populares" agrega.
El reclamo urgente de los vecinos es "que se extienda la red de Aysa que tenemos a una cuadra del barrio. Y que el gobierno municipal junto con esta empresa nacional, firmen lo que se tenga que firmar para que el barrio Las Casitas acceda al agua".

Hasta ahora, la Municipalidad no les da respuesta pese a que día a día la situación resulta más preocupante.
Por su parte, la empresa Aysa lleva un camión cisterna que abastece al barrio de agua, una vez por día. No alcanza: no es respuesta al reclamo de los vecinos que piden que urgentemente se extienda la red de agua.
Es innentendible que a esta altura de haber comenzado el aislamiento preventivo obligatorio se condene a estas familias a vivir sin agua.

En el barrio se encuentra un merendero. "Ayer ( miércoles) les dimos de comer a 250 personas en el merendero. En estas condiciones se hace más difícil mantener esos platos de comida. Desde que comenzó la cuarentena se triplicó el número de asistentes".
La pobreza, la precarización laboral, en esta situación se transforma en un factor determinate en la vida de estas familias.

Las condiciones precarias de vivienda se exacerban en esta situación. Barbara agrega: " Yo salí a recorrer el barrio de nuevo ayer y encontré cuatro familias que no tienen baño en sus casas".
Como en gran parte de barrios y asentamientos del país, la falta de agua potable o las pésimas condiciones de acceso a ella son una constante: son años y años de decisión política de no invertir en planes de obras públicas.

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El aislamiento preventivo y obligatorio afecta sobre todo a quienes se encuentran en peores condiciones laborales, quienes viven de lo que ganan a diario o quienes son despedidos o cesanteados.

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El gobierno actual repite constantemente que el problema fueron los 4 años de gobierno macrista y su política neoliberal.

El intento de lavarse las manos por parte del peronismo , es una mala jugada. Esto lo saben los propios trabajadores y trabajadoras que viven en los barrios, donde cada dos años, pasan los gobernantes para la campaña y ponen parches a estos problemas estructurales, para seguir como si nada.