El informe final de la Policía Federal, que tiene más de 700 páginas, fue enviado a la Corte Suprema, que supervisa el caso. La denuncia incluye a Bolsonaro entre 37 personas por los delitos de “abolición violenta del estado democrático de Derecho, golpe de Estado y asociación ilícita”.
Viernes 22 de noviembre de 2024 11:51
La Policía Federal de Brasil presentó cargos este jueves contra el expresidente Jair Bolsonaro por la supuesta trama de golpe de Estado que buscó derrocar y hasta asesinar al actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, después de las elecciones de 2022, informaron fuentes oficiales.
La institución denunció a 37 personas por los delitos de “abolición violenta del estado democrático de Derecho, golpe de Estado y asociación ilícita”.
Bolsonaro estaba en la lista de investigados de la causa y está entre los señalados por la Policía Federal, así como diversos militares, entre ellos algunos generales, antiguos ministros y exasesores de su Gobierno.
En la lista también está Walter Braga Netto, general de la reserva del Ejército y quien fue ministro de la Presidencia y de Defensa, además de candidato a vicepresidente de Bolsonaro en 2022; y Almir Garnier Santos, excomandante de la Marina.
¿Qué han revelado las investigaciones?
La investigación constató la existencia de una trama que actuó “de forma coordinada”, tras las elecciones de 2022, para “intentar mantener” a Bolsonaro en el poder.
Esta misma semana, las autoridades brasileñas detuvieron a cuatro militares y un agente de la Policía Federal acusados de idear un plan para el magnicidio de Lula, el vicepresidente Geraldo Alckmin, y el juez del Supremo, Alexandre de Moraes, instructor de la causa.
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El objetivo, según la investigación, era asesinar a Lula y Alckmin, y crear un “comité de crisis” integrado por militares afines a Bolsonaro. Los planes barajaban el envenenamiento como forma de segar la vida de la fórmula que ganó los comicios de 2022.
El informe final de la Policía Federal, que tiene más de 700 páginas, fue enviado a la Corte Suprema, que supervisa el caso.
En él se recoge que los investigados “se estructuraron” en diferentes núcleos para llevar a cabo el golpe. Eran grupos con tareas como difundir mentiras, incitar a los militares, buscar salidas jurídicas; ejecutar los planes golpistas y hasta uno de inteligencia.
El fiscal general de Brasil, Paulo Gonet, se encargará ahora de analizar el informe policial y presentar o no ante el Supremo una denuncia formal contra los investigados.
Bolsonaro carga contra el juez que lo investiga
Al conocer la decisión de la Policía Federal de Brasil, Bolsonaro atribuyó las acusaciones presentadas hoy a la “creatividad” de un juez del Tribunal Supremo.
“El magistrado Alexandre de Moraes conduce toda la investigación, ajusta los testimonios, arresta sin denuncia, lanza redes para pescar posibles pruebas y tiene una asesoría bastante creativa”, afirmó Bolsonaro en un comunicado difundido en sus redes sociales tras ser informado de las acusaciones.
En el comunicado, Bolsonaro dijo que la acusación ahora la tendrá que analizar la Procuraduría General de la República, ante la cual sí tendrá la oportunidad de defenderse.
“Tengo que ver qué dice esa acusación. Voy a estudiarla con el abogado. Pero eso obviamente pasará por la Procuraduría, en donde comienza la lucha. No puedo esperar nada de un equipo (de investigadores de la Policía Federal) que usa la creatividad para denunciarme”, afirmó.
¿Qué puede pasar?
La Izquierda Diario conversó con Danilo París, editor de la sección política de Esquerda Diário de Brasil, que señaló que "Dada la gravedad de las acusaciones y la abundancia de información divulgada, es difícil imaginar que este episodio no provoque una respuesta contundente por parte del Poder Judicial. Y ha llegado el momento propicio para la estrategia del poder judicial. El recientemente frustrado intento de ataque terrorista contra el STF ya había dado la alarma, allanando el camino para que la opinión pública reclamara medidas enérgicas contra los sectores radicalizados del bolsonarismo. Los acontecimientos de la actual conspiración podrían causar un gran daño a Bolsonaro, quien ya enfrenta una serie de acusaciones y tiene sus derechos políticos suspendidos. No sólo está en juego su carrera política, sino que su libertad está en riesgo, como nunca antes".
Sobre el Poder Judicial, París señala que "el Supremo Tribunal Federal renueva su legitimidad y aumenta sus poderes. Ahora su objetivo son los bolsonaristas, pero la fuerza acumulada por la toga se erige como el principal poder bonapartista del régimen y que ya forma parte de garantizar importantes ataques a los derechos sociales, y anteriormente fue agente del golpe institucional y del Lava Jato", pero aclara que "A pesar del actual momento de fragilidad de Bolsonaro, la derecha y la extrema derecha emergieron como los grandes ganadores de las elecciones municipales, controlando la mayoría de los municipios del país. Figuras como Tarcísio de Freitas, con su agenda ultraneoliberal, y Pablo Marçal, que ya articula alianzas para 2026, emergen como alternativas para liderar este campo político".
"En cualquier caso, el hecho es que las recientes revelaciones muestran tanto el deterioro del sistema político brasileño como el reaccionario proyecto militar-bolsonarista. La respuesta a esto requiere poner a la clase trabajadora en escena como una fuerza social capaz de reconfigurar los pilares de un régimen que muestra signos cada vez más claros de degradación política y social", finaliza.
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