El extitular de la ANSES habló del Frente para la Victoria, del peronismo y de la reaparición pública de su exjefa. Más cerca de Massa que de sus “queridos amigos militantes” de ayer.
Viernes 15 de abril de 2016 13:23
Fue esta mañana en el programa de Jorge Lanata en Radio Mitre del Grupo Clarín. Quien encabezó el lote de diputados que hace poco se separó del bloque del Frente para la Victoria analizó la reaparición de su exjefa en el Poder Ejecutivo.
Desde el estudio de Mitre le preguntaron si para él el “frente ciudadano” con el que sueña Cristina es una especie de “certificado de defunción del Frente para la Victoria”.
“Yo no sé qué sueña y qué no sueña Cristina”, respondió Bossio. “Yo lo único que te digo es que el peronismo se está rearmando, que quiere volver a enamorar. Que el peronismo tiene responsabilidad de gobierno en muchas provincias e intendencias. Que los sindicatos están preocupados por la situación social que vive la Argentina pero que son responsables también en todo lo que significan las expresiones en un país que tiene complejidades muy difíciles. En ese sentido estamos más preocupados en cómo ordenarnos y reagruparnos”, sentenció.
“No hay que embarrar la cancha”
Respecto a las elecciones internas en el PJ, Bossio afirmó que “hay un ordenamiento de las listas. José Luis Gioja es alguien con experiencia, fue gobernador, y me parece que eso es importante para esta etapa”. Habló a su vez de la necesidad de abrile las puertas a un “peronismo responsable, criterioso, que propone, que entiende que hay que dar el debate pero que también hay que poner límites. Que hay que ser oposición pero no oponerse por oponerse o embarrar la cancha”. Además de hablarle a los peronistas, sin duda eso fue música para los oídos del propio Macri.
Provocador, Bossio dijo que justamente por eso se juntaron con Massa, con Gioja, con Urtubey y con Facundo Moyano. “Para tener una visión amplia, que es lo que está marcando esta nueva etapa. Es lo que la sociedad pide, porque el pueblo no dejó de ser peronista”.
Si bien dijo que respeta a muchos militantes, cuestionó “la agresión a los periodistas” y se preguntó si el acto de CFK “era necesario en el momento que estamos viviendo de complejidad y dificultades, de una situación que viene de arrastre”.
Caminos que se bifurcan
Explicando lo “difícil” que ve la posibilidad de volver a dialogar con el sector más cristinista del peronismo, Bossio puso el ejemplo del reciente sobreseimiento que tuvo en una causa que le había iniciado nada menos que el mismo Frente para la Victoria.
“Era una causa que no tenía ningún sentido ni razón”, dijo. Se trata de la causa por los chats que Bossio mantuvo con el jefe de bloque del PRO en torno a la discusión del acuerdo con los fondos buitre y que se filtraron en todos los medios. “Si queremos tener prácticas políticas maduras, hay que empezar por casa, ¿no?”, ironizó.
Por último dijo que tiene que haber “una renovación y reestructuración en el peronismo”. Fue en respuesta a si él cree que Cristina puede volver a ser la conductora de ese movimiento político. “Tenemos que volver a enamorar a los argentinos”, dijo. En ese sentido, afirmó, “hay figuras como Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey, el propio Randazzo, intendentes y gobernadores que estamos trabajando en esa línea”.
“Nosotros trabajamos. El resto verá qué hace. La verdad que no nos preocupa mucho lo que hace Cristina”, finalizó.
Vale recordar que Bossio durante gran parte de 2015 jugó su carta electoral como precandidato a gobernador de la Provincia de Buenos Aires dentro del FpV y levantando todas y cada una de las banderas kirchneristas. De hecho fue a pedido de la entonces presidente que se bajó de la pelea para permitir que todo se concentrara en la interna entre Aníbal Fernández y Julián Domínguez. Eso sí, después del “baño de humildad” Bossio consiguió la promesa de Scioli de tenerlo en su gabinete si ganaba la presidencia.
Todo eso ya es parte de un pasado que no pocos prefieren olvidar.