Luiz Felipe era empleado de una agencia subcontratada por Mercado Libre. Trabajaba duro y soñaba con ser contratado directamente por la empresa del argentino Marcos Galperín. Fue despedido de la empresa el 19 de febrero, y se suicidó en el lugar de trabajo minutos después. Colocaron una lona en la zona donde estaba su cuerpo y trasladaron el punto de salida a otro lugar, para que sus compañeros -que tuvieron que seguir trabajando- no pasaran junto al cuerpo.
Jueves 29 de febrero 21:08
Luiz Felipe, un joven trabajador que se suicidó, trabajaba recibiendo y enviando paquetes para empaquetar en un centro de distribución en Cajamar, São Paulo, y era empleado de una agencia subcontratada por Mercado Libre. Recordemos que esta empresa, con sede central en Uruguay, en 2022 fue nombrada como una de las 100 compañías mas valiosas del mundo -según la consultora Kantar que elabora ese ranking-. Su dueño, Marcos Galperín se radicó en Uruguay para evitar pagar impuestos que se cobraban en Argentina.
Según publicó en sus redes sociales y también según compañeros de trabajo, Luiz trabajaba duro y soñaba con ser contratado, era un gran trabajador. Aun así, fue despedido de la empresa el día 19, y se suicidó en el lugar de trabajo minutos después. Según Mercado Libre, el trabajador fue atendido por el servicio de salud y falleció en el lugar. Pero como informaron varios de sus compañeros, falleció en el lugar, solo colocaron una lona para tapar su cuerpo y se trasladó el lugar de salida a la de emergencia, para que los trabajadores continúen con sus labores.
Según Intercept, cientos de trabajadores denuncian haber sufrido tratos abusivos, acoso moral, calor extremo y condiciones laborales inhumanas en los centros de distribución de la empresa, incluido Luiz Felipe Dominicalli. Según los trabajadores, el objetivo que les imponen es 120 entregas por hora, dos por minuto, para la segunda empresa más valiosa de América Latina, la plataforma vio así duplicar su beneficio neto entre 2022 y 2023. Según el Sindicato de Empleados de Comercio de Franco da Rocha, Luiz “había estado sufriendo graves presiones psicológicas por parte de sus superiores”.
La depresión es considerada una de las enfermedades más comunes en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). La elevada tasa de trastornos como la depresión y la ansiedad entre los jóvenes brasileños está directamente relacionada con el trabajo precario. Las diversas opresiones cotidianas, la alarmante tasa de desempleo, la pobreza, la falta de acceso y las injusticias a las que estamos sometidos dentro del sistema capitalista culminan en un escenario donde el suicidio se convierte en una forma rápida (e impotente) de aliviar el sufrimiento.
Es necesario cuestionar profundamente los fundamentos de este sistema irracional, basado en la explotación de una clase por otra, imponiendo una miseria brutal a los explotados y oprimidos.