El sindicato CGT ha denunciado este martes el despido de un empleado de la planta de PSA Madrid, un trabajador que lleva "más de dos meses pidiendo ropa de trabajo a sus responsables sin que estos hayan atendido su solicitud".
Martes 19 de marzo de 2019
Foto: planta de PSA en Villaverde (Madrid).
En un comunicado de la Sección Sindical de CGT en Peugeot Citroën, la planta que el grupo francés tiene en la localidad de Villaverde (sur de Madrid), el sindicato ha calificado este despido de "injusto y arbitrario debido a las mentiras y manipulaciones en las que se ha basado la empresa para llevarlo a cabo" y ha considerado que la carta de despido con la que han comunicado al empleado (Álvaro) su situación está llena de "falsedades y manipulaciones contra su honor como trabajador".
CGT ha explicado que Álvaro ha trabajado durante más de 12 años en la fábrica de automóviles de Peugeot-Citroën, donde “nunca tuvo ningún problema con nadie”, pero ha sido víctima de una campaña de hostigamiento y persecución encabezada por su responsable de unidad o de zona, por lo cual “el compañero estuvo durante meses de baja por depresión”.
“No bastándoles con el daño que le ocasionaron continuaron con el hostigamiento hacia él, inclusive negándole ropa de trabajo, la cual llevaba solicitando cerca de dos meses”, denuncia el comunicado.
El sindicato ha acusado a la empresa de conocer la situación en la que Álvaro tiene que acudir y hacer sus tareas todos los días. “El compañero tiene solo un pantalón que manda a lavandería quedándose sin pantalón de trabajo por la ineficacia de su RU, por ello acude a su puesto con un pantalón de chándal, donde antes de empezar su jornada denuncia su situación anómala”, denuncia el sindicato.
A esta situación la empresa la denomina “mala fe”, poniendo al compañero “contra la espada y la pared sin ninguna justificación”, a la vez que “mienten en la carta de despido cuando escriben palabras que Álvaro nunca dijo” y le acusan de “haber producido una parada de la línea”, cuando “en ningún momento se perdió ni un solo coche ese día”, prosigue el comunicado.
CGT denuncia también que el responsable de unidad que propició el despido de Álvaro “ya ha tenido innumerables problemas en las zonas donde ha trabajado, e inclusive ha habido más trabajadores/as con bajas por enfermedad, fruto de las presiones a las que acostumbra someter”.
Ya en diciembre de 2018 el Instituto Regional de Seguridad Y Salud en el trabajo (IRSST) había emitido un informe “por un problema muy parecido de un trabajador de su misma línea, el cual señala y detecta la falta de capacidad y liderazgo de la jerarquía por su falta de preparación para liderar un grupo de trabajo”, continúa el comunicado.
Por todo esto, CGT entiende que la empresa ha “traspasado una línea intentando imponer una represión” que el sindicato no va a aceptar. En tal sentido la Sección Sindical de CGT en Peugeot Citroën ha convocado una reunión "con carácter urgente" del Comité de Empresa para concretar las medidas que tomar y con el objetivo de revertir la situación.
El sindicato ha anunciado que "no tolerará ningún acto más de represión hacia Álvaro o hacia cualquier otro empleado del centro", al mismo tiempo que ha indicado que rechaza y se opone "firmemente" a su despido.
Esto es una injusticia y no lo vamos a permitir@cgtmetal @cgtopel @CGTMetalMadrid @cgtseat @CGTIvecoMadrid @cgtrenault @CgtVolkswagen @cutcitroen#NoTenemosMiedo #StopRepresionEnPSA #AlvaroReadmisiónYa pic.twitter.com/inbDKIFTWI
— cgtpsamadrid (@cgtpsamadrid) 19 de marzo de 2019
