Las grandes empresas aceiteras y cerealeras se niegan a cerrar un acuerdo con la federación de gremios. Para los aceiteros el salario mínimo y vital debe ser de $ 1.223.000. Las multinacionales ganan fortunas pero no quieren soltar.
Viernes 29 de marzo de 2024 12:38
La Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines (FTCIODyARA) se declaró en estado de alerta y asamblea ante la falta de acuerdo en la negociación colectiva salarial aceitera. Así lo anunció en un comunicado de este jueves.
Allí plantean que en las dos reuniones de la negociación paritaria salarial aceitera que realizamos ante los representantes patronales de las cámaras CIARA, CIAVEC y CARBIO, no hubo avances. “Este accionar empresario manifiesta una clara falta de empatía con la situación de las y los obreros y empleados aceiteros en la difícil coyuntura económica que atraviesa la clase trabajadora” denuncian desde la federación conducida por Daniel Yofra.
Recordemos que los aceiteros plantean históricamente que un Salario Mínimo, Vital y Móvil debe asegurar a los trabajadores y trabajadoras: alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión. Según los cálculos del gremio, esos derechos equivalen hoy a $ 1.223.000.
Las grandes empresas que no quieren aceptar esos aumentos son Cargill (EEUU), Molinos (Pérez Companc), Aceitera General Deheza (Familia Urquía), Dreyfuss (EEUU), Bunge (EEUU), entre otras. Amazan fortunas con la agroexportación, además del mercado local.
Ante esta situación, plantea el gremio, “hemos decidido declararnos en estado de alerta y asamblea permanente, reafirmando nuestro compromiso con el mandato que nos dieron tanto los Plenarios de Delegadas y Delegados como los Congresos Extraordinarios de dirigentes y dirigentas en defensa del Salario y la dignidad de la familia aceitera”.
