El Match por la corona mundial terminó una fecha antes de lo programado tras un lance desesperado a Anand que él mismo calificó luego como un error, “ya no estaba pensando con claridad”. Carlsen fue el mejor.
Martes 25 de noviembre de 2014
Magnus Carlsen, se impuso por 6,5 – 4,5 a Vishy Anand en el match mundial que se llevó a cabo en Sochi (Rusia), es campeón mundial por segunda vez sin llegar todavía a los 24 años. Ahora tendrá el título al menos por dos años ya que el próximo desafío tendrá lugar recién en 2016. Los jugadores se repartieron 1 millón de euros en premios, 60% para el ganador y 40% para el perdedor, aunque deben entregar el 20% para la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE).
Los dos genios del tablero ofrecieron un torneo apasionante. Más allá de imprecisiones y hasta errores cometidos bajo la gran presión de las circunstancias y por momentos del reloj que a veces obliga al apuro, ambos jugaron magistralmente y hasta con sorprendentes genialidades que se “salían de la teoría” para sorprender al rival. Desde el comienzo del match salieron a buscar el triunfo en lugar de especular con empates fáciles esperando algún error del oponente.
De esta manera, los y las amantes del juego ciencia pudimos seguir bravísimas partidas que fueron verdaderas “batallas psicológicas” entre los dos contendientes. Así fueron la partida número 3 en la que Anand recuperó la paridad del score con un juego audaz en el flanco dama, derrotando al campeón en apenas 34 jugadas; la sexta donde Magnus vuelve a tomar la punta con un poco de “suerte de campeón” tras cometer un error del que Anand no se percató desperdiciando la oportunidad de pasar al frente; o la terrible 7ma partida, probablemente la mejor del torneo, donde casi baten el récord mundial de partida más larga en un match mundial y en la que el indio demostró tremenda maestría para conseguir tablas en una posición inferior.
Sin escapar ni por un minuto del “business are business” que se impone sobre cualquier deporte por “noble” que sea, el Match Mundial estuvo patrocinado entre otros por el gigante ruso de los hidrocarburos Gazprom y promocionado directamente por el gobierno de Vladimir Putin que puso especial atención al torneo. No obstante, la cobertura del evento fue bastante accesible a todo aquél que gozara de una conexión más o menos estable a internet. Ya sea desde cualquier computadora familiar o celular táctil, se pudo seguir con un mínimo “delay” las once partidas jugada a jugada y con comentarios en vivo de Grandes Maestros como el ruso Peter Svidler (2743 Elo y puesto 18 del mundo) o la joven Maestro Internacional georgiana Sopiko Guramishvili (2388 y puesto 80 del ranking femenino).
El “Tigre de Madras” no está muerto
El 23/11 era la anteúltima partida y el campeón llevaba un punto de ventaja sobre el desafiante que jugaba con negras. Como en varias ocasiones del torneo, se enfrentaron en la Defensa Berlinesa de la Apertura Española que está calificada de “tablífera” por los expertos ya que es una defensa muy sólida y lleva mayormente a un empate. Pero claramente Anand no buscaba el empate, aunque eso le hubiera permitido disputar la partida siguiente y definitiva llevando la iniciativa con blancas. Como relata el experimentado Leontxo García, “Anand hizo temblar el tablero con una idea genial en la 23, que le daba ventaja. Además, el reloj empezaba a apretar a ambos. La tensión era extrema: si el indio convertía esa ventaja en victoria, igualando el marcador, conduciría las piezas blancas el martes en la última con la moral de Carlsen por los suelos” (El País, 23/11).
Pero la audacia de Anand fue respondida sólidamente por el campeón y posteriormente, quizás por los nervios, quizás por el cansancio acumulado tras días de “combate”, el indio arriesgó un “lance” sacrificando una torre a cambio de un alfil para conseguir mayor iniciativa y ataque sin tener del todo en cuenta que estaba frente al “Mozart del ajedrez”. Carlsen aceptó el desafío y lo derrotó con maestría en pocas jugadas más. Aquí la partida en cuestión, comentada por el mencionado periodista y ajedrecista.
En la posterior conferencia de prensa, Anand reconoció que en ese momento “ya no estaba pensando con claridad” y que había perdido el control sobre sus nervios. Pese a esta última derrota y algunos errores cometidos durante el match como el grosero de la partida 2, el indio demostró que a pesar de sus 44 años sigue dando pelea en los mayores tableros. Jugó a un nivel mucho mayor que el año pasado cuando Carlsen lo derrotó fácilmente y hasta le ganó la 3 partida al campeón (a quien no le ganaba desde 2010). Por fortuna para los amantes del buen ajedrez, frente a una malintencionada pregunta de uno de los periodistas sobre si iba a dejar el ajedrez profesional tras esta derrota, el cinco veces campeón mundial y actualmente 6to del mundo, contestó: “No”.