El año 2014 más de 1500 trabajadores de Costa-Carozzi del sindicato Nº 2, en su mayoría mujeres decidieron irse a huelga con bloqueos de fábrica, al ritmo de cantos y de los métodos propios de la lucha de los y las trabajadoras, tras esta importante experiencia es que desde La Izquierda Diario hemos querido abordar en esta entrevista la jornada laboral de una mujer operaria de fábrica.

Zikuta Santiago de Chile
Jueves 23 de abril de 2015
Lorena Fuentealba tiene 41 años de edad y trabaja como operaria de la empresa Costa-Carozzi hace ya aproximadamente 2 años. Tiene dos hijas una de 18 años de edad y otra de 10.
Lorena trabaja por turnos, mañana, tarde y noche. Sus hijas quedan al cuidado de su suegra con quien muchas veces tiene complicaciones debido a la distancia generacional y modo de entender la vida. Nuestra entrevistada expresa que muchas veces trabajar con turnos le genera ciertos problemas sobre todo con su hija mayor, ya que esta mantiene una relación de pareja y Lorena quisiera estar más presente en la vida de su hija, pero los límites de tiempo son mucho mayor a veces y no logra mantener una fluida relación, nos comenta con pena.
Nuestra entrevistada trabaja en la sección de galletas en la planta de San Bernardo específicamente, en las galletas Nik, esta tiene que separar las galletas buenas de las malas, volver a armar las galletas que se rompen y a veces envasar. Hay días destinados al aseo nos comenta, “con un grupo de compañeras debemos asear las maquinas que como operarias utilizamos, ese día todas quedamos muy cansadas porque las maquinas son enormes”. Explicita también que “lo que queda de basura entre medio de las maquinas, es decir- los restos de productos- son enviados a otras fábricas donde se produce comida para animales, los jefes nopierden nada”.
“Cuando estoy de turno de mañana tengo que levantarme a las 5 de la madrigada, el bus de la empresa pasa cerca de mi casa menos mal “nos enfatiza. Yo soy trabajadora de planta, en Costa la mayoría de mis compañeros de trabajo son subcontratados, es decir contratados por empresas externas, el trato es diferente para ellos y nosotros, tenemos mayores beneficios, pero no debiera ser así, porque todos hacemos lo mismo”. Los jefes han decidido mantener esa diferencia, porque así, estamos desunidos.
“El año que paso nos fuimos a huelga toda la planta, esta experiencia nos sirvió mucho para conocernos entre nosotros, pero hoy las condiciones de trabajo siguen igual, han echado a varios de mis compañeros que participaron, hubo compañeros que se prestaron para trabajar los días de huelga y eso genero mucha rabia también, fue mi primera huelga como trabajadora, nunca antes había vivido algo así, hicimos turnos, tarreos, cortes de calle, fue muy cansador estar en huelga.”
“La jornada laboral que tengo es de 8 horas, el sueldo es muy bajo y los turnos matan muchas veces la vida y el tiempo para compartir con quienes uno quiere”