Llevando apenas una semana de suplencia, el nuevo alcalde Ignacio Pozo nombró como jefe jurídico a Marcelo Encina, abogado cuestionado por mal uso de recursos destinados a la defensa penal gratuita. Un nuevo ejemplo de la corrupción de la casta política.
Domingo 16 de agosto de 2020
Con la salida de Karen Rojo del Municipio de Antofagasta el alcalde suplente Ignacio Pozo debió elegir diversos asesores, entre estos definió a Marcelo Encina, presidente regional del Partido Radical y exSeremi de Justicia durante el gobierno de Michelle Bachelet, como Jefe del Área Jurídica.
Sin embargo, Encina cuenta con otro prontuario que incluye demandas laborales por no pago de remuneraciones, descuentos ilegales y usos inadecuados a fondos destinados a la defensa penal de quienes no cuentan con recursos para tener un abogado particular; diversos casos que abrieron un fuerte cuestionamiento tanto a Encina como al nuevo alcalde.
Lo anterior se hizo notar especialmente redes sociales en donde los usuarios cuestionaban la corrupta práctica de disponer el nombramiento de cargos a dedo para devolver favores políticos.
Miyarai Jiménez, de la Coordinadora de estudiantes secundarios Antofagasta, “Desconfiamos de Encinas y Pozo. Porque desconfiamos de todos esos partidos politicos del regimen. del que Pozo y Encinas son parte. Partidos que hace aseguran sus intereses personales y las ganancias de los grandes empresarios mostrando que no les importa la clase trabajadora. A estos políticos los conocemos bien, a la juventud nos trataron de delincuentes por manifestarnos contra el Chile de los 30 años, mientras los verdaderos delincuentes están en cargos importantes como Karen Rojo o como el propio Piñera.”
Así mismo señaló “También tenemos que cuestionar que, tras la salida de Karen Rojo, la elección de su suplente fue a puertas cerradas sin que intervenga la población, ¿o solo podemos opinar cada cuatro años?”
“En medio de este momento, donde el gobierno, los partidos del oficialismo y de la oposición son fuertemente cuestionados, es más necesario que nunca que el conjunto de la clase trabajadora se organice para luchar por acabar con el poder y el control político de los empresarios y sus partidos, y que seamos nosotros los que definamos poder decidir por nuestras vidas” finaliza la joven secundaria.
Es ahora más que nunca que tenemos que salir a levantar un partido distinto a todos esos partidos politicos del regimen, que sea para la clase trabajadora y que luche por frenar los ataques a nuestras condiciones de vida y las de nuestras familias. Impulsemos una alternativa distinta para que los mismos de siempre no decidan por nuestra por nuestras familias.