Brillante carrera de Checo Pérez: mantiene el control en pista y gana el Gran Premio de Azerbaiyán. El piloto mexicano, que arrancó sexto, controla a Hamilton media carrera y le gana la pulseada mental al supercampeón en la re-arrancada a una sola vuelta.
Raúl Dosta @raul_dosta
Domingo 6 de junio de 2021
Sergio Checo Pérez mostró su valía como conductor en la pista de Bakú, en Azerbayán, que se convirtió en la más difícil en lo que va de la competencia de la temporada 2021 de la Fórmula 1 (en todo el proceso de prácticas-calificación-carrera se estamparon fuertemente 7 autos y una decena más se despistaron salvándose por las vías de escape). Y fue recompensado con un valioso triunfo.
En las prácticas libres logró el mejor tiempo en la segunda de ellas y buenos resultados en las restante, lo mismo que su compañero de equipo Max Verstappen, actual líder del campeonato. Sin embargo en la pruebas de calificación el equipo de Red Bull fue el más afectado en la Quali 3 (la que define las posiciones de arrancada para la carrera) cuando buscaban su vuelta más rápida, debido al accidente del piloto japonés Yuki Tsunoda que hizo que se suspendiera la calificación y que al final Checo tuviera que arrancar en sexto lugar.
Gran arrancada
La arrancada de la prueba se dio con el deseo frenético de varios pilotos de poner en su lugar las posiciones que los accidentes de la calificación impidieron decantar en las dos primeras vueltas, Hamilton, Pérez y Verstappen, se avalanzaron sobre el "pole position" Charles Leclerc de Ferrari.
Hamilton no pudo disfrutar su liderato por mucho tiempo pues en la entrada a pits para cambiar llantas, donde la estrategia preferida de la mayoría fue usar neumáticos duros. Las maniobras de los mecánicos de Red Bull fueron muy eficaces respecto a los de Mercedes y así, Verstappen y Pérez se alternarían el primer lugar.
Así las cosas, Checo Pérez tuvo oportunidad de cumplir con el papel que tanto le han exigido los directivos de Red Bull, cuyos directivos no repararon en considerar el proceso de adaptación al auto, que se ha llevado varias carreras. La tarea era escoltar a Verstappen y mantener bajo control a Hamilton. Y durante más de la mitad de la carrera la cumplió a cabalidad, dándole un colchoncito de 5 segundos a su compañero para que se enfilara al triunfo y de paso arribar él mismo en segunda posición. Era el plan perfecto.
Listo para las grandes contingencias
La elección de neumáticos duros, estrategia para ahorrar una parada, tuvo sus consecuencias en la carrera. Varios terminaron las llantas a punto de reventar y de esta suerte Lance Stroll, de la escudería Aston Martin, saldría proyectado contra el muro de la recta extralarga que tiene este circuito. El fuerte accidente obligaba a parar la carrera pero los comisarios decidieron solo mantener bandera amarillas y relanzar la carrera detrás del "safety car".
Se relanzó la carrera y una vez más Checo Pérez mantuvo a raya a Lewis Hamilton. Sólo faltaban cuatro vueltas para el triunfo y el 1-2 de Red Bull cuando la llanta trasera izquierda del carro del líder, se pinchó haciendo girar bruscamente el auto y proyectándolo contra la barda. Ahora sí se determinó parar la competición con bandera roja faltando dos vueltas para finalizar, quizás para darle una emocionante final a la carrera, pero también le ofrecía en bandeja de plata una gran oportunidad a Lewis Hamilton de adelantarse y ganar el sprint final.
Carrera a una sola vuelta
Se formaron los autos para una re-arrancada con llantas nuevas, todos con las de compuesto suave, las más rápidas, pero las más difíciles de controlar cuando están "frías". Y aquí fue donde Lewis Hamilton, extraño en él, mostró el cobre. La dura semana que pasaron desde las prácticas de los Mercedes, con tiempos mediocres que los colocaban atrás del décimo lugar, la batalla por poner a punto los autos, que su compañero Valtieri Bottas no logró superar (terminó en el lugar 12) colocaron en Lewis una montaña de presión, ante la necesidad de ganar en un relanzamiento a una vuelta.
Checo Pérez reconoció luego de la carrera que su arrancada fue mala y Lewis Hamilton se le fue por delante, pero lo hizo como un novato desesperado y le metió pata sin considerar que la primera curva es muy cercana y no pudo dar vuelta. se siguió de largo. Checo sólo mantuvo la calma que lo caracteriza y se concentró, como declararía después, en calcular el momento de dar vuelta y enfilarse hacia la vuelta del triunfo, escoltado por Sebastian Vettel y Pierre Gasly.
Mientras los vencedores festejaban con sus mecánicos, un avergonzado Lewis Hamilton se quedaba encerrado en su auto durante varios minutos rumiando su derrota. El resultado de la carrera, mantuvo a los líderes del campeonato de conductores en iguales condiciones (105 contra 101 puntos a favor de Verstappen) apareciendo en tercera posición, por ahora un poco rezagado Sergio Pérez con 69 puntos. Mientras, Sebastian Vettel fue designado como el mejor piloto del día, pues avanzó desde el onceavo puesto hasta el apreciado segundo lugar.