El lunes 1 de agosto, los choferes del Transantiago, empresa Subus, realizaron una paralización, principalmente en los recorridos 200 y línea G, debido a la posible quiebra de la empresa y masivos despidos.
Martes 2 de agosto de 2016
La empresa Subus, es una entidad chilena de transporte público que opera 59 recorridos, toda la Unidad 2 del Transantiago (Troncal 2 y Zona G), Eje Vial Norte-Sur (Av. Santa Rosa, Av. Vicuña Mackenna, Av. Recoleta, Gran Avenida J. M. Carrera, y el eje Américo Vespucio Sur) del nuevo plan de transporte urbano para la capital. Está constituida por capitales chilenos y colombianos. Según datos, 800.000 usuarios utilizan la línea Subus.
Subus ha estado en el debate durante las últimas semanas, principalmente por la posible quiebra de la empresa, hecho que se sumaría a otras cuatro entidades que han quebrado en el Transantiago. Esto abrió una incertidumbre, y en los trabajadores no es la excepción.
Debido a lo anterior, el lunes 1 de agosto, decenas de choferes de Subus paralizaron los recorridos 200 y zona G. Boris Guerrero, vocero de los trabajadores de Subus, en entrevista con CNN Chile aseguró lo siguiente:
“es de conocimiento público que la empresa Subus solicitó por vía Tribunales que se acogiese una ley que antiguamente se conocía como ‘ley de quiebra’, donde reordena todos sus activos para proponerle una nueva propuesta a sus acreedores. En ese escenario, lamentablemente existe la posibilidad de que si no se llega a acuerdo, el Tribunal puede liquidar la empresa, y automáticamente, por ley, todos los trabajadores de Subus, alrededor de 6.000, tendríamos que ser finiquitados”, afirmó el dirigente.
Fue a finales de junio cuando Tribunales acogió la solicitud de la empresa operadora del Transantiago, donde se pide la “resolución de reorganización, con el fin de reestructurar sus activos y pasivos”, en base a los procedimientos que fija la ley 20.720 sobre insolvencia y reemprendimiento, que reemplazó a la ley de quiebras:
“Aquí se contraponen dos leyes. Hay una ley de transporte que fue modificada, donde se da facultades a una persona natural que es designada por el Ministro de Transporte, quien debiera tomar la administración de la empresa si esta cayera en quiebra (…) Por lo tanto, lo que nosotros estamos pidiendo es que se clarifiquen dos situaciones puntuales; primero, que nos clarifiquen qué pasará con nuestros finiquitos, y qué pasará con la continuidad de los trabajadores”, se cuestiona el dirigente sindical.
A raíz de las exigencias de los trabajadores, autoridades propusieron una “mesa técnica”, donde hay representantes del Ministerio de Transporte y Ministerio del Trabajo. En una primera reunión hubo una propuesta verbal:
“Se dice que como el administrador provisional va a tomar la empresa, hipotéticamente, sin ninguna deuda, porque todas las deudas quedan pendientes para la liquidación (…) Entonces habría un flujo de cajas y en dos meses se debieran estar pagando los finiquitos (…) Además, ellos se comprometieron re-contratarían a la totalidad de los trabajadores”, sin embargo, el dirigente asevera que todas las medidas legales y administrativas que tomen las autoridades deben quedar por escrito y documentadas, lo que no se ha generado hasta el momento.
Las exigencias de los trabajadores, según Guerrero, son el pago de todos los finiquitos en un plazo máximo de dos meses, y la recontratación de los 6.000 trabajadores de Subus. Para el dirigente “sería una demostración de tozudez de parte del Ministro (de Transporte)”, si decide no aceptar las demandas y firmar un documento. En lo que va del conflicto, las autoridades han rechazado las exigencias de los choferes.