La dirigenta y exlegisladora provincial por el peronismo, Florencia Papaiani, asumió el pasado 14 de julio como nueva ministra de Desarrollo Humano de la Provincia. Sigue los pasos del actual ministro de Gobierno, Andrés Meiszner, que asumió como ministro de Economía, tras haber sido ministro de Gobierno y Justicia. Otra muestra más de peronistas que se pasan de bando. Es necesario construir una izquierda de la clase trabajadora y socialista.
Miércoles 17 de julio 16:51
El pasado 14 de julio el gobernador Torres tomó juramento a los nuevos ministros que lo acompañerán en los próximos meses. Entre ellos estaban los peronistas Andrés Meiszner y Florencia Papaini.
En otra muestra más de peronistas que se pasan de bando y reafirman su compromiso con el gobernador derechista. Varios funcionarios destacados del gobierno de Mariano Arcioni y que apoyaron a los candidatos del Frente de Todos en las elecciones de 2023, tanto en la provincia como a nivel nacional cumplen y cumplirán funciones destacadas bajo el mando del derechista Torres. Serán parte de los engranajes que darán gobernabilidad a un gobernador que ajusta y apoya las políticas del gobierno nacional, incluyendo el Pacto de Mayo y la ofensiva extractivista.
Está claro que mandatarios provinciales, entre ellos, Ignacio Torres, mandatarios municipales como Merino o Sastre y el Poder Ejecutivo nacional comparten una premisa: el ajuste ordenado por el FMI debe ejecutarse. Difieren en formas, tiempos y víctimas. Pero como se hizo evidente en la firma del Pacto del 25 de Mayo, Milei no está solo en su política: ajustar y ordenadamente, lo acompaña el peronismo político y sindical.
A la integración de dirigentes peronistas al gobierno libertario, como Daniel Scioli o Francos, por solo mencionar dos de los más conocidos, Chubut no podía ser la excepción, así desde que asumió Ignacio Torres se sumó a su gabinete Andrés Meiszner, quien estuvo al frente del RENAR (Registro Nacional de Armas) durante la primera presidencia de Cristina Fernández de Kirchner y luego fue parte del gobierno de Mariano Arcioni siendo secretario de Trabajo, ministro de Educación y luego Secretario General de Gobierno, del actual diputado Parlasur electo en las listas del Frente de Todos.
Y el domingo pasado también se sumó al gabinete de Torres, la dirigente peronista Florencia Papaiani, quien fuera ministra del gobernador Mario Das Neves, después diputada provincial, y tomó protagonismo como candidata a la intendencia de Trelew en 2019 y como senadora en 2021 por el peronismo. También fue gerenta General del Instituto Provincial de la Vivienda y Desarrollo Urbano (IPVyDU) durante el gobierno de Mariano Arcioni.
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Hoy, como ministros del gobierno provincial del Pro, recorren el mismo sendero que el peronismo transitó bajo el gobierno de Mauricio Macri y hoy hace ante el gobierno de Javier Milei. Deja pasar un ajuste feroz mientras preparan las condiciones para intentar un retorno hipotético, sobre la tierra arrasada luego de cuartro años de motosierra y licuadora, electoral en 2027. Una nueva formulación de aquel “Hay 2019” que llevó a la parálisis de las luchas contra el ajuste de Cambiemos; que permitió un crecimiento sideral de la pobreza; que habilitó el escenario para el acuerdo con el FMI y el consecuente salto en el endeudamiento nacional y que en la provincia implicó sumarse al Pacto Fiscal, la lucha de 17 semanas en 2019 contra el pago escalonado de los salarios de los estatales provinciales y la rebelión de diciembre de 2021 que derrotó la megaminería, como parte de un intento de avanzar en el saqueo de los bienes comunes naturales.
Tomando el antecedente de los cuatro años de gobierno de Macri donde el peronismo le votó decenas de leyes, la noticia no sorprende. Misma actitud toman los legisladores peronistas en la legislatura provincial donde le han votado la mayoría de las leyes a Torres. El peronismo contempla la escena pensando en las elecciones de 2025 o 2027. Es que el ajuste es el programa nacional y provincial de todas las administraciones.
Pero no solo los dirigentes políticos del peronismo acompañan la política de Torres, también lo hace la dirigencia sindical burocrática de la CGT y las CTA que juega a las declaraciones fuertes. Repite como eslogan la amenaza del paro. Pero el paro no llega, aunque los ataques persistan, como pasa con los docentes, que son víctimas de una brutal licuación de sus salarios y perdida de derechos con la votación de la ley de presentismo docente y ninguno de sus sindicatos ha enfrentado este ataque, sino que han preferido hasta este momento, el dialogo y que avance la política del gobierno.
En síntesis el gobierno de Torres y su apoyo a las políticas de Milei en la provincia solo se sostienen en un clima de paz social porque el peronismo cumple un papel central en sostener el equilibrio que necesita al gobierno para llevar adelante el ajuste y el ataque al pueblo laborioso. Lo hacen, en primer lugar, porque carece alternativa frente a la crisis actual. Por más disquisiciones generales sobre las crisis de deuda que se hagan, sin el desconocimiento soberano de la deuda fraudulenta e ilegal y la expulsión del FMI y sus planes de ajuste del país, no hay alternativa real a Milei ni a Torres.
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Ignacio Torres todavía tiene que llevar a la acción concreta el pacto de mayo que acaba de firmar entre ellos la entrega de bienes comunes naturales. Sin dudas, el Gobierno encontrará resistencia por parte de los trabajadores y el pueblo. Y, sumado al terrible escenario económico, con un plan que ni siquiera parecen acompañar los mercados o el FMI, la presidencia de Javier Milei muestra muchas debilidades y contradicciones.
La pasividad que protagonizan las organizaciones sindicales y sociales está atada al ofrecimiento de negociar los formatos del ajuste que hacen los dirigentes burocráticos de la GCT y la CTA y los dirigentes peronistas. Para quienes quieren enfrentar y derrotar los salvajes ataques contra las mayorías populares no hay allí opción política. El peronismo en la oposición funciona hoy como garante de la orientación decidida por Milei, Torres, el FMI y el gran poder económico.
Para enfrentar esta situación nos proponemos construir una izquierda de la clase trabajadora y socialista que enfrente al liberalismo de la derecha y el estatismo blando del peronismo, que deja pasar el plan de Milei y Torres y se opone a siquiera pensar un país libre del orden del FMI y las multinacionales.
Para organizar esa fuerza nos proponemos una intervención audaz en las luchas y desarrollar una amplia batalla político-ideológica contra la derecha y frente al peronismo, para multiplicar la influencia política del PTS/FITU y sus fuerzas militantes en toda la provincia, ampliando nuestro trabajo en Trelew, Comodoro Rivadavia, Esquel y la Comarca Andina junto a decenas de simpatizantes y colaboradores. En síntesis, nos proponemos generar una corriente que comience por identificarse y reivindicar su pertenencia a una izquierda de la clase trabajadora y socialista, y culmine en una nueva camada de militantes que aumente nuestras fuerzas de aquí a fin de año.
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Ariel Iglesias
Nació en Buenos Aires en 1969. Es docente (jubilado). Militante del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS). Escribió en Ideas de Izquierda "La Educación en el país de los soviets"; "Chubut: Crónica de un triunfo popular contra la Megaminería". Escribe y edita La Izquierda Diario+ en Chubut.