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Red Internacional
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Calama. Chuquicamata: “Lo tuvieron trabajando 6 horas después de un test de antígenos que arrojó Covid positivo en 20 minutos”

Recibimos una denuncia anónima de un trabajador contratista de Berliam, una de las empresas perteneciente a Ferrovial de capitales españoles. La denuncia emana desde la división Chuquicamata de Codelco, a solo un par de días de que Minera Escondida se viera obligada a declarar más de 300 contagios, en el marco del considerable aumento de casos COVID-19 en la región de Antofagasta.

Viernes 21 de enero de 2022

Esta es la denuncia de un trabajador de una de las empresas contratistas de Codelco Chuquicamata, quien por razones obvias y para evitar alguna persecución denunció lo vivido por un grupo de trabajadores pertenecientes a Berliam, empresa que presta servicios de mantención y aseo en la minería.

“Desde que comenzaron a aumentar nuevamente los casos de covid, tanto la empresa de la que soy parte como Codelco, comenzaron a retomar las medidas sanitarias para evitar los contagios en la faena. Una de estas es la realización de antígenos todos los días mientras estamos de turno. Varios sabemos que el antígeno es insuficiente, ya que muchas veces arroja falsos negativos a diferencia del PCR, pero parece que este no es el único problema”.

Continúa “el día de hoy cerca del medio día a mi y a mis compañeros nos mandaron a hacer como de costumbre el antígeno, después de eso fuimos los mismos de siempre los que estuvimos trabajando hasta el final de la jornada. El problema aparece cuando nos enteramos que uno de nuestros compañeros arrojó positivo, y a nosotros nos dijeron que el resultado del antígeno es arrojado a pocos minutos de realizado el exámen, por lo que nos sorprendimos de la noticia”.

El mismo trabajador denuncia que “Después de horas, terminando el turno, no podíamos entender cómo la empresa a la que pertenecemos ni tampoco Codelco que es la que hace estos test, no fue capaz de informar a tiempo el resultado, más si era positivo. Nos preguntamos cómo tenían a nuestro compañero trabajando seis horas después de un test que arrojó positivo, un test rápido que supuestamente tira resultados a los veinte minutos. A nadie le importó la salud de nuestro compañero, menos la de nosotros quienes nos relacionamos muchas veces por el mismo trabajo sin medidas de distanciamiento, lo único que sentí en ese momento fue rabia e impotencia, de ver cómo nos miran las empresas como números, que con tal de seguir enriqueciéndose son capaces de poner en riesgo nuestra salud, la de nuestros hijos y también nuestro entorno. Con esto, si todas las empresas de la minería funcionan así, mientras se llenan la boca hablando de seguridad, no me cabe duda que deben haber muchos más contagios de los que creemos en lugares como estos, esto no puede ser así, no puede ser que la plata tenga mucho más valor que la vida de cada uno de nosotros”.

La gran minería como foco de contagios

Quisimos reproducir la denuncia de este trabajador, ya que el alza de contagios por COVID-19 en la región de Antofagasta estas últimas semanas ha aumentado considerablemente, y tiene como epicentro a las dos comunas principales de la misma, Antofagasta y Calama.

Conocida por ser una región minera, con alta afluencia de trabajadores y trabajadoras, donde son decenas de miles quienes se encuentran ligados a la gran minería, los contagios que van en aumento vuelven a poner en la mesa el problema de la minería como foco de contagios. Pero hasta ahora, las autoridades de la región han omitido o no han querido dar a conocer cuál es la relación entre el alza de casos diarios que arroja números de una nueva ola y los grandes centros de producción industrial y minero.

Hasta ahora, no hay información pública clara de cuántos de los contagios de la segunda región están ligada a los grandes centros productivos o de servicios a la gran minería, lo que no es de extrañarse, ya que estos lugares desde que comenzó la pandemia no se han detenido un sólo segundo y hemos visto como estos últimos 30 años los gobiernos de turno no han hecho más que resguardar el saqueo y las ganancias de los grandes grupos mineros.