La oposición de derecha se retiró para no discutirlos en la Comisión Bicameral. El Frente de Todos, que quiere validar 116 decretos de Alberto Fernández, le recordó que Macri también gobernaba por decreto. Un poco de escándalo con el fin de ocultar que ambos espacios apelaron de manera permanente a este mecanismo antidemocrático.
Jueves 18 de noviembre de 2021 13:15
“El Gobierno comienza la llamada a una nueva etapa de atropello institucional y rompe la posibilidad de acuerdos en el Congreso de la Nación”. La que habló, después de un tiempo, fue Elisa Carrió. La referente de la oposición de derecha volvió a la escena este jueves para sumarse a un mini-escándalo que armó Juntos por el Cambio en el Congreso.
Fue por la decisión de no avalar la discusión de 116 decretos en la Comisión Bicameral que tiene la función de confirmarlos. Radicales y macristas denunciaron que el Frente de Todos busca “apurar” el trámite de aprobación de los mismos dado que perderá la mayoría en el Senado. Esto ocurrirá luego de que asuman los nuevos y nuevas senadoras, elegidos este domingo 14/11.
En el inicio de la reunión de la comisión, criticando la convocatoria, el diputado macrista Pablo Tonelli señaló “desde nuestro punto de vista, este tratamiento demorado y conjunto de 116 decretos está muy lejos de respetar la norma. Estamos dictaminando a destiempo y sin la oportunidad de dedicarle un tratamiento serio. No convalidamos ni estamos de acuerdo. Impugnamos la convocatoria y el tratamiento conjunto”.
El oficialismo, por su parte, respondió -una vez más- recordando la gestión de Macri. Fue la mendocina Anabel Fernández Sagasti la encargada de contestar las críticas. “Cuando ustedes gobernaron no había pandemia y en un solo decreto se cargaron 19 leyes y realizaron 150 modificaciones de leyes”, recordó.
El hecho es completamente cierto. Lo que no quita que el Frente de Todos gobernó por decreto la mayor parte de 2020. De hecho, muchos de los DNU que la Bicameral trató este jueves pertenecen a ese año. Usando la pandemia como argumento, el oficialismo nacional mantuvo sin funcionar ambas cámaras parlamentarias nacionales por muchos meses y gobernó por decreto.
De esta forma se evitó reunir el Congreso y habilitar la discusión de múltiples propuestas y proyectos que podrían haber modificado la gestión ante la pandemia. Solo a modo de ejemplo, el Frente de Izquierda impulsó un conjunto de normas frente a la situación sanitaria que no fueron tratadas. Entre los motivos para esa falta de tratamiento hay que contabilizar la falta de funcionamiento de ambas cámaras parlamentarias.