El pasado viernes 15 de diciembre se realizó la segunda audiencia, esta vez presencial, en el ministerio de trabajo, entre las patronales de la clínica y el sindicato ATSA que fue como parte de la “representación” de los mas de 400 trabajadores que hace 10 días continúan tomando la clínica, por el retraso en el pago de salarios e indemnizaciones, pero también contra el cierre y en defensa de sus puestos de trabajo. Cabe destacar, que se vienen plantando hace meses contra el sistemático vaciamiento del Instituto Panamericano, propiedad de Víctor Santamaría, empresario de Grupo Octubre y presidente del peronismo en la ciudad.
Lunes 18 de diciembre de 2023 20:01
Para preparar esta instancia decisiva, los trabajadores el jueves 14, realizaron una asamblea general en la que votaron a mano alzada la participación de representantes propios en la audiencia y así fue que dos de ellos se hicieron presentes como veedores, aunque no por casualidad, no les fue permitido ingresar.
También votaron la continuación del fondo de lucha para sostener las necesidades elementales para resistir con la toma del edificio frente a la incertidumbre, el hambre y la necesidad de cargar la SUBE. Así como la difusión del conflicto contra el cerco mediático de los medios hegemónicos socios de Santamaría, y el llamado a la solidaridad de organizaciones y personalidades frente a su lucha.
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A la espera de las novedades, se encontraron con algunos miembros de la directiva del sindicato y una delegación de más de 80 delegados y congresales de la lista Celeste y Blanca de Héctor Daer y Javier Pokoik en la puerta de la clínica que hicieron de público frente a la lectura del acta-acuerdo que conformaron en la audiencia. En la misma se destaca que el Instituto Panamericano declina su intención de disolver la firma, pero que acuerda con Osperyh (obra social del Suterh- sindicato de encargados de edificio, encabezado por Víctor Santamaría) el traspaso de la totalidad del personal, respetando antigüedad, salarios y condiciones, pero bajo distinto convenio y modalidad de contratación.
Es importante poner sobre la mesa que fue la organización de los trabajadores con sus propias herramientas la que permitió que la patronal tuviera que retroceder de sus primeras intenciones, que eran cerrar definitivamente sus puertas, dejando a las familias en la calle y sin cobrar nada de lo adeudado. Tuvieron que retroceder, al ver que empezaba a surgir desde abajo el lanzamiento de su fondo de lucha para sostener la pelea, la difusión en redes sociales y desde medios alternativos, los primeros saludos solidarios de múltiples organismos, sindicatos, las y los trabajadores de Madygraf, estudiantes, y diputados como Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Alejandrina Barry, Raúl Godoy y Vanina Biasi.
En este contexto es que los trabajadores son un ejemplo de resistencia. Es imprescindible ser conscientes de que este no es el momento de bajar la guardia hasta la nueva audiencia en el ministerio de trabajo, pactada para el viernes 22 de diciembre. Es necesario que los trabajadores sigan profundizando su organización en asambleas, impulsando una deliberación colectiva frente a las promesas que por el momento, solo son papeles y de las que con justa razón desconfían.
Va a ser de esta manera, que van a lograr conquistar la reabsorción y reapertura de la clínica sin resignar sus condiciones, haciendo respetar no sólo antigüedad, sino el convenio colectivo de trabajo al que pertenecen por ser trabajadores de la sanidad con todos los derechos conquistados. Es también con su propia organización y unidos a los compañeros que quieran continuar en sus puestos laborales, que podrán reclamar las justas indemnizaciones y salarios adeudados todos aquellos que no estén dispuestos a seguir trabajando bajo esa patronal flexibilizadora y ajustadora que hace meses los hace sufrir un calvario.
Los trabajadores de la clínica de los Virreyes muestran el camino, frente al terrible ajuste que el nuevo gobierno y las patronales ya empezaron a aplicar, y en el que se destacan numerosas clínicas que están siendo vaciadas como la Clínica 23 de Diciembre - Ciudad de Ciudad Evita, o como denuncian las y los trabajadores de la Fundación Favaloro que se encuentran cobrando su salario en partes, u otros casos de los que llegan denuncias a este diario, sobre el incumpliendo de los últimos aumentos paritarios.
De igual manera, en múltiples dependencias públicas y empresas amenazadas de ser privatizadas, empiezan a surgir asambleas de sus trabajadores dispuestos a enfrentar el plan de guerra que ha lanzado el gobierno de Milei, contra los trabajadores y la clase media, cargado de tarifazos y devaluación.
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La situación de la Clínica de los Virreyes es solo la anticipación de lo que va a venir. Y cada conflicto que triunfe, nos deja en mejores condiciones para enfrentar al ajuste empobrecedor y las amenazas represivas de la ultraderecha en el poder. Por eso desde la agrupación Marrón Salud venimos aportando todo lo que está a nuestro alcance para que los trabajadores ganen, apostando a unir la fuerza que los poderosos quieren dividir. Esa fuerza vamos a poner en las calles este 20 de diciembre junto a miles de trabajadores de la salud, de las escuelas, la industria, los servicios, jóvenes precarizados, trabajadores desocupados y el movimiento de mujeres, porque nadie se salva solo, e invitamos a todos los trabajadores que compartan esta perspectiva a sumarse.