Este miércoles 10 comenzó en Buenos Aires la X Conferencia de la Fracción Trotskista, organización internacional de la que forma parte el PTS, con participantes de 12 países.
Miércoles 10 de agosto de 2016 16:23
Este miércoles 10 comenzó en Buenos Aires la X Conferencia de la Fracción Trotskista, organización internacional de la que forma parte el PTS, con participantes de 12 países de América Latina, Estados Unidos y Europa.
En la misma están presentes delegaciones del Movimiento Revolucionario de Trabajadores de Brasil, la Liga Obrera Revolucionaria de Bolivia, la Liga de Trabajadores por el Socialismo de Venezuela, el Movimiento de los Trabajadores Socialistas de México, el Partido de Trabajadores Revolucionarios de Chile y militantes de la FT en Uruguay. De Europa participan compañeros y compañeras de la Corriente Comunista Revolucionaria en el NPA de Francia, del grupo RIO de Alemania, de Clase contra Clase del Estado español y militantes de la FT en Inglaterra. También participan de esta Conferencia los compañeros que impulsan Left Voice en Estados Unidos, para el público angloparlante. Todos parte de la red internacional La Izquierda Diario.
Durante la mañana de esta primera jornada se desarrolló una discusión sobre las principales tendencias de la situación de la economía internacional, que abrió con un informe de Paula Bach, de la dirección del PTS de Argentina, con un posterior debate en el que participaron miembros de las distintas delegaciones.
La Izquierda Diario entrevistó a Paula Bach para conocer algunos de los principales elementos que se discutieron:
"Hicimos tres definiciones alrededor de las cuales se abrió la discusión. La primera fue plantear cuáles fueron las condiciones de la crisis económica que se desarrolló desde la caída de Lehman Brothers. Lo fundamental que definimos es que hubo dos elementos centrales: el crecimiento de China y la políticas monetarias de EE. UU. los países centrales que permitieron evitar que la crisis se transformara en una catástrofe, pero no obstante tuvieron serias consecuencias porque el crecimiento fue muy débil."
"La segunda definición que hicimos es que a partir de aproximadamente 2014, esa relación entre EE. UU. y China como base y colchón ante la crisis, se terminó y abrió una situación distinta de la economía mundial en la cual está planteado que se pueda profundizar la crisis e incluso que se genere una recesión similar o peor a la de 2008/2009; y en este segundo momento, en esta parte de la crisis que estamos transitando, tienden a unificarse las condiciones de bajo crecimiento en los países centrales y las condiciones de fin de ciclo de lo que sucedió en lo que podríamos llamar la periferia, durante el primer momento de la crisis."
"Por último definimos que existe una situación en la cual las consecuencias de la crisis económica mundial tuvieron repercusiones serias: Fundamentalmente por ahora en las clases obreras de los países centrales, y que eso está en la base de fenómenos fundamentalmente por derecha como es el de Trump en EE. UU. o como fue el discurso que impulsó el Brexit, aunque también tiene elmententos por izquierda, aunque menos desarrollados. Una de las cuestiones más interesantes que planteamos como novedad para desarrollar es que ese tipo de fenómenos pueden llegar a poner un límite a la capacidad de las elites dirigentes, del establishment, o como se lo quiera llamar, de administrar la crisis, que es lo que ha estado haciendo durante todos estos últimos años post Lehman Brothers."
Durante la tarde de este miércoles la discusión continuará con un informe sobre la situación política a nivel internacional.